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Adrián Barbón, durante la investidura de Pedro Sánchez. D. CORRAL
Barbón: «No acepto una financiación que se negocie de forma bilateral»

Barbón: «No acepto una financiación que se negocie de forma bilateral»

El presidente regional dice que su posición, «heredada» del Ejecutivo anterior, es «nítida» y defiende que se tenga en cuenta el envejecimiento y la dispersión

A. MORIYÓN

OVIEDO.

Sábado, 10 de agosto 2019, 02:56

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El presidente del Principado, Adrián Barbón, aseguró durante su discurso de investidura que tan pronto como se abriera la negociación de la reforma del sistema de financiación autonómica su Gobierno defendería un modelo «centrado en las necesidades de gasto y el coste efectivo de los servicios», y no en la «capacidad fiscal de cada territorio». Unas premisas que ayer, después de que Pedro Sánchez se comprometiera a cerrar la reforma en ocho meses y que el resto de las comunidades comenzaran a posicionarse, quiso repetir.

El también secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA) señaló que su Gobierno mantiene en este sentido un posicionamiento «claro, nítido y heredado» del Ejecutivo de Javier Fernández que pasa, recordó, por la defensa de una financiación autonómica «justa, adaptada a una realidad de población dispersa y envejecida, y que tenga en cuenta el coste real de los servicios». Barbón defiende que el nuevo modelo no puede basarse únicamente en el número de habitantes que tenga cada territorio, como reclaman las comunidades más pobladas, y que debe tener en cuenta el esfuerzo fiscal que llevan a cabo poblaciones como la asturiana para garantizar la prestación de servicios públicos. No puede ser, dijo, que algunas comunidades que han eliminado tributos y visto devaluados sus servicios pidan compensaciones vía financiación autonómica.

El presidente asturiano aseguró en este sentido que no va a renunciar a conseguir una buena financiación autonómica ya que, defendió, de ello dependen los servicios públicos que se ofrecen en el Principado y, por ello, mantiene que el criterio para el reparto de los recursos debe basarse en cuestiones que vayan más allá de lo exclusivamente numérico. Deben pesar, anotó, otros factores como la dispersión o el coste real de los servicios.

Ante las dudas que ha generado el reciente compromiso adquirido por Pedro Sánchez con Compromís en relación a los plazos para abordar esta reforma, que tuvo lugar durante su ronda de contactos para conseguir apoyos para la investidura, Barbón rechazó cualquier «negociación bilateral». «No vamos a aceptar una negociación que no se construya de forma multilateral y que no vaya más allá de lo exclusivamente numérico», sentenció en declaraciones a los medios de comunicación tras reunirse con empresarios y alcaldes mineros.

No en vano, en el caso del Principado, el grueso de su presupuesto de unos 4.500 millones de euros llega por esta vía, que ascendió a 2.576,18 millones de euros en 2018. Es fácil, pues, entender que en juego está el sostenimiento de los principales servicios públicos, especialmente la sanidad, la educación y las políticas sociales.

Por este motivo, tal y como ya avanzó en su discurso de investidura, Adrián Barbón buscará un acuerdo «sólido» en el Parlamento asturiano en relación al modelo de financiación y también «con otras comunidades» que permita a la región, dijo, «conseguir un sistema justo y equitativo». «No cuesta lo mismo la atención sanitaria o educativa en una gran ciudad, donde la población está muy concentrada y es más joven, que en un área extensa de orografía compleja y fragmentada en poblaciones envejecidas y dispersas», argumentó en su primer discurso en el Parlamento asturiano.

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