Barbón respalda las negociaciones de Sánchez con ERC que otros barones del PSOE critican
El presidente del Principado insta al PP y Ciudadanos a abstenerse en la investidura «por compromiso con la calidad democrática»
DANIEL FERNÁNDEZ
GIJÓN.
Sábado, 14 de diciembre 2019, 03:22
Los socios elegidos por Pedro Sánchez para pescar los apoyos necesarios que permitan su investidura agitan las aguas socialistas. Poco necesita el PSOE de unos años hacia aquí para que el mar por el que navega el barco se agite. Y de todas las galernas que de forma periódica atraviesa, es la del modelo territorial la que más le cuesta capear. Si ya de por sí defender un modelo de Estado federal hace fruncir el ceño a algunos barones, el hecho de elegir como potenciales socios para una investidura a un partido independentista como ERC o que los socialistas catalanes defiendan el reconocimiento de esa comunidad como nación no hace más que agitar aún más el barco. No hay, aparentemente, amenaza de motín, pero el PSOE de Pedro Sánchez está hoy dividido entre barones críticos con la negociación con Esquerra Republicana de Catalunya y otros que defienden su estrategia. Y es en este grupo donde se sitúa el presidente del Principado y secretario general de la FSA, Adrián Barbón, quien ayer, a través de un comunicado, manifestó su apoyo a la estrategia que lleva a cabo el Partido Socialista para intentar cerrar un acuerdo de investidura con los republicanos catalanes.
Sin tapujos y de forma clara, sin dejar lugar a las dudas, el líder de los socialistas asturianos mostró su «respaldo» a las negociaciones «lideradas» por Pedro Sánchez «para desbloquear la situación política estatal» y formar gobierno cuanto antes. Y lo apoya, continúa Adrián Barbón, porque «Asturias necesita cuanto antes que haya un Ejecutivo en plenitud de funciones, que atienda las necesidades urgentes de nuestra industria y de nuestras infraestructuras».
Añade el dirigente socialista en su argumentación que «defender la investidura de Pedro Sánchez y la formación de un gobierno estatal es un acto de responsabilidad con Asturias». Por ello, pide expresamente al PP y Ciudadanos que se abstengan en la investidura, facilitando así la investidura del presidente del Gobierno en funciones: «Esa sería una gran prueba de compromiso democrático», recalcó Barbón.
Reunión con Sánchez
A diferencia de otros presidentes autonómicos, como es el caso de Alfonso Fernández Mañueco, Adrián Barbón sí participará en la ronda de contactos que Sánchez ha convocado para explicarles sus planes de cara a la investidura. El presidente de Castilla y León ya dijo que no acudiría a esa reunión al entender que el jefe del Ejecutivo en funciones lo único que «persigue» con estos encuentros es «encontrar una coartada» para retomar las negociaciones institucionales con la Generalitat.
Pero los recelos sobre las intenciones de esa convocatoria no solo vienen desde los barones territoriales del PP. Algunos socialistas, como el de Aragón, Javier Lambán, o el de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, también mostraron sus recelos. El primero, esta misma semana, puso reparos a las negociaciones con Esquerra, formación a la que llegó a calificar como «indeseable» y ayer mismo apuntó que un pacto con los republicamos sería «una pésima solución».
García Page avisó el miércoles de que no quería pedir «vaselina» como regalo de Reyes para aceptar un acuerdo con Esquerra y reiteró su defensa de la unidad de España.
Barbón, ayer, salió en defensa de la estrategia del líder socialista. Para el presidente asturiano «no caben dudas» sobre la conveniencia de desbloquear la situación para disponer de un Gobierno «en plenitud de funciones». «Es la decisión sensata -añade el jefe del Ejecutivo regional- y no debemos plantearnos siquiera la hipótesis de unas terceras elecciones. Sería un fracaso colectivo que no podemos permitirnos».
Adrián Barbón entiende que en la actual coyuntura política, marcada por la «tensión territorial» y tras una repetición electoral, «es comprensible» que el único candidato a la investidura «quiera contar con la opinión de todos los gobiernos autónomos».
La responsabilidad, continúa el secretario general de la FSA, atañe a todas las fuerzas democráticas. Por eso defendió la llamada que Pedro Sánchez ha hecho a los presidentes autonómicos para explicarles sus planes. «Me resulta incomprensible que alguien pretenda desentenderse como si la gobernabilidad les fuera ajena. Esto nos incumbe a todos, sean de la formación que sean, en especial a las de mayor implantación». Por eso, insiste en su llamamiento al Partido Popular y Ciudadanos para que faciliten la investidura con su abstención: «Esto es un ejercicio de compromiso con la calidad democrática».