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El Gobierno busca el apoyo de Podemos e IU con un despliegue de gasto social e inversión

Sanidad, educación y bienestar rozan los 3.000 millones de euros y el dinero para obras crece un 21%, hasta 374 millones | El presupuesto vuelve a cifras anteriores a la crisis y alcanza los 4.485 millones gracias a la mayor aportación de la financiación; 643 millones van a deuda

ANDRÉS SUÁREZ

OVIEDO.

Miércoles, 29 de noviembre 2017, 01:47

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Una lluvia de millones en forma de gasto social e inversión para tratar de enganchar definitivamente a Asturias al tren de la recuperación económica y, como paso previo, para vencer las resistencias de Podemos e IU y facilitar que los presupuestos de 2018 salgan adelante. Es la síntesis del proyecto económico y de las intenciones políticas del Gobierno en el día en que el documento en cuestión se registró en la Junta General, devolviendo al Principado a los tiempos anteriores a la crisis económica con un volumen de recursos disponibles para el próximo ejercicio que asciende a 4.485 millones de euros, un 6% más que este año. El borrador está plagado de guiños a las dos fuerzas con las que los socialistas quieren alcanzar un consenso, aunque las posiciones, sobre todo con la formación morada, se mantienen aún distantes especialmente en lo que tiene que ver con el diseño de la red educativa de 0 a 3 años.

En una negociación presupuestaria, cada parte tiene su estrategia y sus bazas. Las de los grupos que se perfilan como potenciales aliados, apretar todo lo posible las clavijas al Gobierno para obtener el mayor porcentaje de sus objetivos. Las del Ejecutivo, arrollar con un torrente de cifras y datos, en un primer análisis favorables, al calor de la reactivación económica y de la mejora de los ingresos. Y, al mismo tiempo, cortejar al hipotético socio trufando el proyecto con medidas que, en este caso Podemos e IU, han ido planteando durante las negociaciones. Así se llega al documento que la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, llevó ayer a la Junta General para dar inicio a su farragosa tramitación parlamentaria.

Después de unos cuantos años de apreturas, y de que las cuentas de 2017 diesen un primer respiro, el proyecto de presupuestos para 2018 devuelve a la región a las magnitudes económicas previas a la crisis. Las cuentas escalan hasta los 4.485 millones, nada más y nada menos que 259 por encima del ejercicio vigente. La mejora es posible gracias al incremento de los recursos que el sistema de financiación autonómica, ahora en el epicentro del debate, inyecta en las arcas regionales: 2.951 millones, el 77% del total. Una cifra que da la medida de lo relevante que resulta para el Principado el proceso de reforma que está a punto de comenzar.

Sanidad, el 38% del total

El proyecto presupuestario apabulla especialmente en lo que tiene que ver con el gasto social. Prácticamente 3.000 millones de euros -2.994, en concreto, el 66% del total- se destinan a cubrir las principales necesidades en materia de sanidad, educación y política social. Solo el capítulo de la salud se 'come' el 38% del presupuesto, 1.710 millones, tal y como anticipó ayer este periódico. Otra cosa es que la distribución de estas y otras cantidades -la gestión educativa se lleva 808 millones y los servicios y derechos sociales obtienen 427 millones- y las prioridades en su gasto sean del agrado de Podemos e IU. En algunos casos es así. En otros, sobre todo para la formación morada, no.

El desglose de datos y políticas deja claro que el gabinete socialista no le piensa poner fácil el 'no' a sus dos potenciales aliados. En el caso de IU el grado de entendimiento madurado durante la negociación era amplio, pese al clima de desconfianza que impera en la coalición, azuzado en los últimos días por la polémica de los planes de empleo. En cuanto a Podemos, las distancias, sobre todo en lo relativo a la futura gestión del 0 a 3, son más profundas. Pero los socialistas quieren aminorar esas discrepancias y atraer al partido morado a su terreno.

Con ese fin, el proyecto aparece salpimentado de propuestas que han sido objeto de discusión con ambas fuerzas en las conversaciones de las últimas semanas. Para la red de 0 a 3 años se contemplan 11,4 millones, un repunte de 1,8 millones respecto del actual ejercicio que permitirá abrir siete nuevos centros. Un avance, sí, pero que se queda muy lejos de la gratuidad total que Podemos reclama ya para el curso 2018-2019. También hay 500.000 euros para poner en marcha la unidad anticorrupción que reclaman Emilio León y los suyos, así como recursos extra para vivienda (4,2 millones) y pasos adelante en sanidad (más plazas, una unidad de gestión responsable para ahorrar en las compras o el compromiso de aplicar las conclusiones de la comisión de investigación sobre las listas de espera).

También los planteamientos de IU se ven reflejados, ya sea en el caso del 0 a 3, del asturiano (1,6 millones, 96.377 euros por encima de este ejercicio) o del salario social (120 millones para atender a 1.500 nuevas familias). El Gobierno ha echado la red y ahora espera que las negociaciones que se abrirán hasta el próximo día 22, cuando se debaten las posibles enmiendas de totalidad, resulten fructíferas.

Con todo, el proyecto deja varios flancos que permiten a la oposición intentar hacer mella en el armazón presupuestario del Gobierno. La deuda es uno de ellos -Podemos siempre pone el foco en este capítulo- y para 2018 hay una previsión de endeudamiento de 643 millones, pese a que el Ejecutivo insiste en que el marco en el que se mueve, con la previsión de cerrar este año en 4.260 millones, resulta perfectamente asumible. En materia de 0 a 3 la propuesta es, a ojos de León y los suyos, del todo insuficiente.

El proyecto, por cierto, hace una reserva para una subida del sueldo de los funcionarios del 1,75%, a la expectativa de lo que detallen los presupuestos estatales.

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