El Avilés pierde la magia del Suárez Puerta

Con la baja previsible de Natalio por lesión, Javi Rozada sorprendió en el once titular con la entrada de Nico Fernández como delantero de referencia en lugar de Santamaría. El técnico ovetense apostaba así por un ataque con tres jugadores por detrás del delantero centro, con Davo y Sergio García abiertos en las bandas y Alarcón más centrado como enganche.

El partido comenzó con un guión similar al de hace dos semanas ante el Compostela. El Avilés salió al campo con la intención de dominar el juego y tuvo las primeras aproximaciones al área rival, en especial por la izquierda donde intentaban conectar Sergio García y Nico Fernández. La primera ocasión local llegaría a los cinco minutos gracias a una falta cerrada botada por Josín que no encontró rematador y acabó en las manos de Alberto.

Pero el Fabril respondió rápido con una jugada personal de Hugo Villaverde, que se plantó solo dentro del área del Avilés por la izquierda y su disparo fue desviado por Álvaro Fernández a córner. El saque de esquina acabó con un remate alto por encima de la portería del Avilés.

El equipo gallego se iba estirando poco a poco a medida que fue encontrando a Bil para lanzar los contraataques, en especial por las bandas. En una combinación de Alfaro y el delantero visitante, el balón volvía a Bil tras un despeje apurado de Luis Martínez, y el portero Álvaro volvía a lucirse con otro despeje a córner.

Al Avilés empeza a costarle salir con claridad de la presión del Fabril, con las bandas bien tapadas y Nico Fernández un tanto perdido con correcciones continuas de su entrenador sobre su posición.

El principal peligro de los avilesinos llegaba a balón parado. Casi en el minuto 15, una jugada ensayada a la salida de un córner, Osky centraba bien desde fuera del área, pero el remate de cabeza Babin forzado fue a las manos del portero visitante Alberto.

Los dos equipos se tomaron un respiro en el ecuador de la primera mitad, si bien el Fabril siempre daba la sensación de crear más peligro en sus aproximaciones al área rival, que acababan en disparos que sacaba una vez más con solvencia Álvaro, o en numerosos saques de esquina.

El Avilés también recibía en ese periodo dos malas noticias, con sendas tarjetas amarillas a Sergio García y a Kevin Bautista, de nuevo condicionado demasiado pronto como sucedió ante el Compostela. Tanto los jugadores como el técnico blanquiazul protestaron ambas acciones y la falta de equidad en las amosteciones del colegiado Manso Rojas, que sacó cinco tarjetas amarillas al Avilés por sólo una al Fabril en todo el partido.

Kevin Bautista sería el protagonista de la ocasión más clara en la primera mitad. Una buena jugada de Soler desde la derecha acababa con un centro del lateral valenciano y un remate de cabeza del sevillano que obligaba a hacer una intervención de mérito a Alberto para enviar la pelota a córner. En el saque posterior, Alarcón repetiría oportunidad de cabeza, aunque su remate se iba manso a las manos del portero del Fabril.

El equipo gallego volvería a reaccionar en la recta final de la primera parte, donde tuvo dos ocasiones claras parta irse al descanso con ventaja. Una falta directa lanzada por Marotías obligaba a otra estirada de Álvaro Fernández, y ya en el descuento Hugo estaba a punto de anotar gol tras superar la salida de Álvaro, aunque sacó finalmente la defensa blanquiazul.

El Avilés tenía un plan para la segunda mitad, pero le duró poco más de diez minutos. Javi Rozada metió en el campo en el minuto 54 a Santamaría en sustitución de Nico Fernández y dos ocasiones de Davo y Kevin Bautista animaban al equipo y a la hinchada. Pero las lesiones volvieron a cebarse con el equipo blanquiazul, que se quedaba rápidamente sin Davo por una dolencia muscular. Apenas habían transcurrido trece minutos de juego y el mierense dejaba su sitio a Callís para adelantar a Soler a su posición.

No sería la única desgracia de los avilesinos. El propio Soler tenía que retirarse cinco minutos después tras sentir un pinchazo en un contraataque en el que realizó un sprint por la banda izquierda. El Avilés se quedaba sin dos puntales ofensivos y Rozada improvisaba una línea de ataque con Alarcón en la derecha y Mecerreyes de enganche.

Las continuas interrupciones bloquearon a los jugadores locales, que no consiguieron inquietar con peligro la portería del Fabril en la segunda mitad. Los gallegos supieron cerrar bien los canales habituales del juego del Avilés y salir con peligro al contraataque. En una de esas transiciones llegaría el primer gol de Kevin Sánchez en una combinación que sorprendió a la defensa blanquiazul.

Era el minuto 73 y en ese momento el equipo de Rozada ya miraba más hacia arriba que hacia su portería, aunque sin inquietar al filial deportivista, que tenía claro que podía matar el partido y desaprovechó una pérdida de balón de Mecerreyes en el centro del campo para dejar solo a Guerrero ante Álvaro, que resolvió con acierto el mano a mano con el jugador del Fabril.

Era sólo otro aviso, porque apenas tres minutos, en el 80, después llegaría otro contragolpe letal, con la defensa avilesina descolocada y Kevin Sánchez de nuevo acertado para batir, esta vez de vaselina, a Álvaro. Era la puntilla para un Avilés que apenas había generado peligro en la segunda mitad y que veía escapar por primera vez los tres puntos de su feudo.