«Es un honor poder entrenar al Avilés»

«Para mí es un honor poder entrenar al Real Avilés. Es el equipo al que iba a ver de pequeño en el Muro de Zaro desde Las Vegas, tuve la suerte de ser jugador y ahora empiezo aquí, en este gran club, mi ciclo de entrenador», sostiene. Abraham regresa al conjunto blanquiazul «a poner mi granito de arena para que el Real Avilés vuelva a ser un club normal y los aficionados se puedan sentir orgullosos por la calle».

Más allá de la categoría en la que milite el equipo, que lógicamente condicionará una planificación que ya han iniciado tanto el nuevo entrenador como Alain Menéndez, «el único objetivo es que la gente nos apoye y que los jugadores nos hagan disfrutar, ya que pese a quien le pese el fútbol es de los futbolistas». Aunque no quiere avanzar demasiado, pues será presentado de forma oficial el próximo viernes 1 de junio, a las 20 horas en el Suárez Puerta, el joven preparador local tiene claro que «es conveniente avilesinizar el equipo. Hay buenos jugadores en la zona y esa debe ser la prioridad. A partir del lunes iremos concretando cosas».

A Abraham, que como futbolista ha militado desde Primera Regional hasta Segunda División B, además de en el Caja Segovia de la División de Honor de fútbol sala, no le da vértigo su primera y exigente experiencia como entrenador senior. «Entrené a críos en el Navarro, el Avilés Deportivo y aquí en el Avilés, pero siempre me gustó más entrenar a adultos. Tengo muchas ganas y plena confianza tanto en mis aptitudes como en el proyecto del club. Estoy seguro de que la gente va a disfrutar».

El avilesino, con la sinceridad por bandera y sin dejar nunca indiferente a nadie, regresa al club tras su paso por Colunga, Llanera y Luarca con la mente puesta en reflotar deportivamente al Real Avilés desde el banquillo.