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MARÍA SUÁREZ
OVIEDO.
Viernes, 13 de septiembre 2019, 04:13
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El entrenador del Real Oviedo, Sergio Egea, siempre manifestó su deseo de implementar el 4-4-2 como sistema y también se mostró franco con las razones por las que no lo podía poner en marcha: la tardía llegada de Bárcenas y la desafortunada lesión de Joselu. Tras cuatro semanas de competición que no han salido como estaban previstas -el equipo solo ha sumado un punto de doce posibles-, el argentino por fin tiene a los dos disponibles y completa con ellos un amplio abanico de posibilidades en ataque, que van desde Joselu hasta Riki, pasando por Bárcenas, Omar Ramos o Ibra. Lo más difícil parece lo del senegalés, que no está teniendo apenas minutos pese a la falta de un segundo punta.
Bárcenas, que se incorporó al equipo sin hacer pretemporada, llega más rodado tras jugar dos partidos con Panamá, los mismos que le impidieron estar disponible la última jornada ante el Mirandés. Joselu, por su parte, no pudo optar a minutos en Anduva tras la expulsión de Christian, pero lleva tres semanas al ritmo del grupo y está listo para coger protagonismo. El propio jugador onubense comentó en la previa a ese encuentro que, aunque se compenetra bien con todos sus compañeros, tenía ganas de ver cómo se desenvolvía al lado de Ortuño.
El punta murciano está siendo la mejor noticia de un Real Oviedo que no acaba de dar con la tecla para aprovechar el acierto del de Yecla y convertir sus goles en puntos. El delantero, autor de tres de los cinco goles que lleva el equipo, no se entrenó con el grupo ni el miércoles ni el jueves, pero se reincorporará al trabajo grupal hoy mismo tras haber sido padre durante la jornada de ayer.
La incógnita sigue siendo, como cada jornada, su compañía. En las dos primeras citas ligueras el goleador azul jugó solo en punta y en los dos encuentros, ante el Deportivo y el Lugo, marcó. En ambos choques Lolo, que parte de la medular, trató de sumar en ataque, pero su aportación desde el trivote no fue resolutiva.
Egea probó en Fuenlabrada a mover a Sangalli de la banda y acercarlo por dentro a Ortuño. La maniobra dejó hueco a Omar Ramos en el once, pero relegado a la banda, y la fórmula tampoco dio el resultado esperado. En la jornada posterior, Sangalli volvió al costado y el canario se cayó del once para hacer hueco a un Riki, que no solo ocupó la mediapunta, sino que se sumo al ataque con Ortuño desde atrás, haciendo en determinados momentos del juego de segundo delantero.
El cuerpo técnico decidió volver a cerrar la puerta por segunda semana consecutiva. Con la defensa más o menos clara por la sanción de Christian, toca trabajar el ataque. Egea tendrá que decidir si da la alternativa a Joselu en el Tartiere o si sigue probando a nutrir la mediapunta con el resto de opciones.
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