Captagón, la 'droga yihadista' que amenaza a Europa
Se trata de un fármaco prohibido en Occidente desde los ochenta y consumido principalmente en Oriente Medio, donde la comercializan países vinculados al Estado Islámico
La nueva amenaza estupefaciente de Europa no es un fármaco nuevo ni una droga inventada en laboratorio; se trata de 'captagón', a la que durante muchos años se la conocía como la 'cocaína de los pobres' en Occidente. El captagón fue un fármaco que se recetaba bajo prescripción médica para combatir la depresión en la década de los sesenta. Se trata de un psicoestimulante, producto de la combinación entre anfetamina y teofilina.
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Era un fármaco totalmente legal y regulado en Occidente pero, cuando varios estudios demostraron la tendencia adictiva de estas píldoras -aunque también se puede consumir en inyecciones-, las autoridades sanitarias retiraron el permiso y se ilegalizó en numerosos países occidentales en los años ochenta, convirtiéndose en una droga de contrabando.
Aparte de su uso como antidepresivo, el consumo de captagón se realizaba para combatir la narcolepsia y la hiperactividad, ya que la peligrosa combinación de anfetaminas y teofilina producía una sensación de «cierta euforia, acompañada de insensibilidad al dolor», según relataba un especialista médico de la Oficina Antiestupefaciente francesa (OFAST) al diario 'ABC'. Por tanto, el captagón crea una reacción parecida a la del 'speed' (metanfetamina), droga en polvo ya conocida popularmente en Europa.
La 'droga yihadista', en aumento de producción desde 2021
Actualmente, se la conoce bajo el nombre de 'la droga yihadista', un título que es el resutado de que su producción y comercialización siga siendo mayoritaria en países de Oriente Medio (Arabia Saudí, Jordania, Irak o Siria) vinculados con el Estado Islámico. De hecho, se cree que una gran parte de los ingresos del yihadismo proviene del tráfico de esta droga.
El fármaco produce una anulación del miedo y el cansancio, por lo que fue una droga usada ampliamante en las conquistas de las regiones de Siria e Irak por parte del Daesh entre 2014 y 2019. Actualmente, se suministra a Irak y se produce en Siria, donde la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) la señala como principal punto de creación de captagón, traficándola a través de la frontera y de allí al resto de países.
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De hecho, hace unos meses las autoridades antidroga requisaron más de seis millones de pastillas de captagón en la capital iraquí de Bagdad, la cual fue una operación que resultó, además, en varias detenciones.
Recientemente, las autoridades francesas han relacionado el consumo de captagón (una droga que ha aumentado su comercio exponencialmente desde el año pasado) con los atentados ocurridos en Europa, en concreto, el tiroteo de París en noviembre de 2015 (mayormente conocido por la atentado a la 'Sala Bataclan') y el de Niza en julio de 2016 (cuando un terrorista condujo deliberadamente un camión de carga hacia una multitud). De este último suceso, se sabe que el hombre era un consumidor habitual de dicha droga.
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