¿Cómo se conduce con granizo?
Hay una serie de recomendaciones de seguridad que debes tener en cuenta si te sorprende una granizada al volante
El granizo, que suele aparecer por sorpresa, es uno de los peores enemigos de los conductores. En cuestión de minutos, la carretera puede convertirse en una pista de hielo sobre la que es muy difícil mantener el control del vehículo porque hace que el coche pierda adherencia. ¿Qué hacer en esos casos?
Extremar la precaución y evitar un exceso de confianza es el mejor consejo para circular si una granizada te sorprende al volante. Sin embargo, hay algunas recomendaciones que se pueden para aumentar la seguridad útiles también en caso de fuertes lluvias
1. Enciende las luces. Así te haces ver por otros conductores y les das una referencia mucho más clara de tu posición.
2. No pares en túneles o bajo los puentes. Es sumamente peligroso, ya que te expones a que otro vehículo choque contra el tuyo.
3. Aumenta la distancia de seguridad. Si debes incrementar la distancia con el vehículo que te precede siempre que llueve, ante episodios especialmente complicados debes aumentarla más.
4. Mantén marchas largas, para favorecer una conducción suave.
5. Frena y haz maniobras suaves. Procura controlar ese primer impulso de pisar el freno, porque favoreces que ocurra un accidente por alcance. Si tienes que frenar, que sea con suavidad y siempre en zonas rectas, no en curva. A la hora de girar el volante, como al hacer adelantamientos, debes hacerlo poco a poco y sujetándolo con firmeza.
6. Conserva la calma. El impacto de los granizos en los cristales del coche puede angustiarnos e incluso hacernos pensar que las lunas se van a romper. Trata de ignorarlo. Es muy poco probable que ocurra.
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