230 kilómetros para unir santuarios
«Disfruté mucho, me siento bien», afirma el corredor José Martínez tras completar en dos días el recorrido entre Covadonga y El Acebo
ANDREA ARRUÑADA
CANGAS DEL NARCEA.
Miércoles, 9 de septiembre 2020, 02:10
El corredor cangués José Martínez no contempla en su vocabulario un «imposible» por respuesta. Acostumbrado a las aventuras desde que se aficionó a la disciplina hace casi una década, ayer completó un reto en el que se había sumergido el pasado domingo 6 de septiembre: recorrer los 230 kilómetros que separan los santuarios de Covadonga y El Acebo. La fecha prevista de llegada, el día de La Santina, no pudo tener mayor carga simbólica para este deportista que fue recibido por sus vecinos entre aplausos, saludos, gaitas y vítores.
«Saber que iba a haber tanta gente esperándome me animó, me apoyaron durante todo el camino», señaló Martínez rodeado al cruzar la línea de meta. Sin duda, la sonrisa de su hija y el cariño de su perro fueron la mejor recompensa. A pesar de las pocas paradas que se concedió, no mostró signo alguno de cansancio, la pasión es superior al esfuerzo. «Disfruté muchísimo. Me siento bien, mañana (por hoy) ya veremos», bromeó.
Recomienda a todo el mundo animarse a hacer la ruta, «cada uno como pueda y con más tiempo» del que él dispuso, apenas dos intensos días sin casi tregua. No faltó el toque reivindicativo, pues manifestó que algunos tramos están prácticamente intransitables y necesitan una mejora, sobre todo en la parte oriental.
Para idear la gran hazaña contó con el patrocinio del empresario tinetense Benjamín Alba, cuya intención pasa por recuperar la ruta de las peregrinaciones, que también tendría su encanto, y apoyar al aventurero en todo lo que se proponga. Alba insistió en que durante el trayecto también visitaron a «dos primas», en referencia a «Santa Ana y Santa Isabel», y lanzó el siguiente desafío: conectar El Acebo con la Catedral de Santiago, tierra por excelencia de peregrinos. Martínez parece que ha recogido el testigo y «está dispuesto a hacerlo en cuanto pueda», comentó el empresario. Nada se le resiste.
El anterior reto de Martínez, '100 millas. Por donde camina el oso', le había llevado a correr en junio 180 kilómetros en 37 horas, tres menos de las previstas inicialmente, por el Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias. En aquella ocasión lo hacía en favor de la ruta GR-203 que pretende convertir, junto a Daniel Cuervo y Marcos Verano, en prueba deportiva el año que viene. Será única en la Cordillera Cantábrica, al igual que su tesón.