¿Cuánto engorda un Mundial?

Estamos metidos de lleno en el Mundial de Fútbol un evento que cada cuatro años reúne en torno a las pantallas a los amantes de este deporte e incluso, a los que no son tan aficionados pero sí disfrutan viendo a la Selección de Luis Enrique.

A solas, en familia, con amigos, con compañeros de trabajo, en casa o en un bar... quien más y quien menos se prepara para disfrutar de cada uno de los partidos y lo típico es hacerlo acompañado de algún picoteo fácil y refrescos o cervezas.

Una de las recomendaciones que más repiten los nutricionistas es que se debe comer de manera consciente y despacio, masticando bien cada alimento, algo que desde luego, no ocurre mientras que se está viendo un partido de fútbol. La tensión por el resultado, estar más pendiente de lo que ocurre en la pantalla que de lo que se ingiere y estar hablando mientras hace que se coma de una forma descontrolada y más cantidad de la que se debería.

En la hora y media de duración que tiene un partido de fútbol se estima que un espectador puede llegar a consumir más de 2.500 calorías. Esto supone que, según aseguran los expertos de la plataforma online 'Top Doctors', se puede llegar a engordar entre 3 y 5 kilos durante el mundial. Hay que tener en cuenta que son muchas las personas que se pueden reunir unas 2 veces por semana para ver los partidos.

Un hecho que en esta ocasión se agrava, ya que el Mundial finaliza prácticamente cuando arrancan las copiosas comidas navideñas. «Nos enfrentamos a más de un mes de comidas descontroladas que ponen en riesgo no solo nuestra dieta y peso, sino que también puede provocar problemas de salud como subidas de tensión por el alto contenido de sodio del 'fast food' o que tengamos dificultad para ir al baño por su déficit en fibra», explica el doctor Agustí Molins, especialista en Nutrición y Dietética y miembro de 'Top Doctors'.

Lo normal es que el acompañamiento a los partidos no sea lo más sano del mundo. Lo habitual, según afirma el doctor Molins, suele ser la pizza (una mediana de unos 30 centímetros) serían 1.900 kilocalorías (kcal), una hamburguesa que aportaría en torno a 850 kcal., un par de cervezas (130 kcal) o un refresco de cola (150 kcal) y, cómo no, unas patatas fritas (230 kcal.)

Los expertos recomiendan apostar por otro tipo de productos más saludables para picotear durante el partido para que, aunque se suela ingerir más de la cuenta, no tenga una repercusión tan dañina para el peso ni la salud.

Productos como los pepinillos, que tienen un menor aporte calórico que las aceitunas y unas deliciosas chips de verduras, que se pueden hacer en muy poco tiempo al horno y sin apenas aceite. Chips de calabacín, de boniato o de cale, por ejemplo, pueden ser una buena alternativa.

Otra opción muy interesante es preparar unos crudités de verdura, de zanahoria por ejemplo, o de apio o pimiento rojo y verde y tomarlos con salsa de yogur, humus o guacamole. Gustará a todo el mundo.

Para los amantes de los productos del mar, unos mejillones o berberechos al natural o con limón harán las delicias de todos y, además de su bajo contenido en grasa, son una importante fuente de hierro y de vitaminas A y B.

Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) también recomiendan huir de las «omnipresentes patatas fritas» y sustituirlas por otro tipo de productos como los frutos secos que tienen mucha proteína, fibra, vitaminas y minerales. Eso sí, aconsejan escogerlos «sin sal, grasas o azúcares añadidos» y servir diferentes tipos, «con la mezcla te beneficias de las ventajas nutricionales de cada fruto seco».

Todos los platos tienen una versión saludable si en lugar de comprarlos hechos los cocinamos nosotros mismos. Elegir el picoteo con cabeza hará que las horas de fútbol y sofá no se traduzcan en tantos kilos de más al final del Mundial.

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