Secciones
Servicios
Destacamos
CRISTINA COTO DE LA MATA
Jueves, 19 de enero 2012, 03:39
La propuesta del Gobierno de Asturias de revisar el actual modelo de financiación autonómica es una medida valiente y muy necesaria para nuestra región. Porque si todos estamos de acuerdo en que Asturias presenta peculiaridades que la debilitan, como su población estancada, el segundo peor crecimiento del PIB por habitante en los últimos diez años, unas estructuras paralizadas que lastran enormemente sus posibilidades de desarrollo futuro, o la tasa de población activa más baja de España, es lógico concluir que, ante un trato igual al de otras comunidades autónomas mejor situadas, el efecto será distinto, contradiciendo el principio constitucional de solidaridad interterritorial. Por ello, si el trato es, no ya igual, sino más gravoso, como ha sucedido con los ajustes decretados por el Gobierno central el pasado día 30 de diciembre, haciendo recaer en Asturias un 10% del grueso del recorte, los efectos son ya desproporcionadamente negativos.
Así pues, bienvenida sea la propuesta del Gobierno del Principado de revisar el modelo de financiación vigente. Que el portavoz del PSOE la haya tildado de «ocurrencia» entra dentro de lo normal. El Partido Socialista, que, por poner sólo un ejemplo, nunca defendió los fondos mineros, callando y silbando mientras el Gobierno de Zapatero se marchaba dejando caducar casi 200 millones de euros que nos debían a los asturianos, considerará «ocurrencias» todo intento valiente de defender los intereses del Principado. Porque, mientras ellos iban al Consejo de Política Fiscal y Financiera a callar y practicar el rodillazo cómplice ante los camaradas de Madrid, este año por primera vez se ha ido a reivindicar los intereses de Asturias. Unos intereses que no pueden desligarse de nuestros condicionantes; en concreto, la delicadísima situación económica derivada de doce años de despilfarro y endeudamiento socialista. Por ello, es el colmo de la caradura política que los pródigos del PSOE se atrevan a ilustrarnos acerca del déficit público, cuando ellos llegaron a engañar a sus propios compañeros del Ministerio de Economía al recurrir a endeudarse a través de la Junta de Saneamiento, porque no computaba a efectos de déficit. Obviamente, hasta que la ministra de Economía, Elena Salgado, les llamó la atención por el burdo ejercicio de picaresca.
Este es el escenario: deudas del anterior Gobierno (más de 300 millones de euros sólo en sanidad) y fuerte recorte procedente del Gobierno central. Solo faltaba que si Cataluña logró primero imponer el actual modelo de financiación, y después, vía Estatut, sacar más tajada sin que el PSOE se sonrojara, no pudiera Asturias revindicar sencillamente un trato igualitario, además con todo el soporte constitucional.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Encuentran a una mujer de 79 años muerta desde hacía varios días en su domicilio
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.