El PSOE propone implantar la 'Zona 30' en los núcleos urbanos de Siero

El portavoz del Grupo Municipal Socialista de Siero, Guillermo Martínez, propuso ayer la implantación en los núcleos urbanos del concejo de la denominada 'Zona 30', un área debidamente delimitada en la que los vehículos no puedan circular a velocidades superiores a los 30 kilómetros por hora. Martínez solicita al equipo de gobierno que encargue a los técnicos municipales un estudio para poner en marcha esta iniciativa.

El PSOE vincula esta propuesta con la necesidad de establecer un nuevo reparto del espacio público, que fomente el transporte colectivo, el protagonismo del peatón, la reducción de los niveles de contaminación acústica y atmosférica, y sobre todo, la mejora de la seguridad vial. Martínez comentó que la 'Zona 30' era una de las iniciativas que tenía en estudio el anterior gobierno «pensando en resolver problemas de fluidez del tráfico».

Ya se ha implantado en muchas ciudades, en Oviedo por ejemplo, como factor de equilibrio para asegurar una adecuada circulación de personas y mercancías, y al mismo tiempo, mejorar la seguridad de los peatones «con un coste relativamente poco elevado en relación a otras formas de gestión del actual problema urbano». Entre sus ventajas, el portavoz socialista menciona el papel protagonista del peatón y la eliminación de los tráficos de paso, con la consiguiente mejora ambiental. Asimismo, asegura que estas zonas han conseguido hasta un 50% de reducción de los accidentes.

Desde el PSOE son conscientes de la complejidad de la fase de estudio para poner en marcha esta medida, de ahí que propongan la intervención de los técnicos. Ellos serían los encargados de separar las vías principales de las secundarias, establecer el grado de intensidad de tráfico de cada una de ellas, así como su repercusión sobre el conjunto de la circulación del tráfico en las citadas áreas.

Plan de Movilidad Sostenible

Martínez va un poco más allá y propone la elaboración de un Plan de Movilidad Sostenible, que de forma «integral y global» aborde aspectos relativos con la contaminación, el transporte público o los carriles bici. Recomienda, por último, que cualquier actuación que se ponga en marcha tenga presente a los vecinos y a los agentes sociales.