Los perros de raza, el doble de caros
Mercado disparado. La falta de canes importados del Este por el cierre de fronteras eleva su coste. Mientras, se cuentan más de 183.000 abandonos al año
YAGO GONZÁLEZ
Domingo, 25 de abril 2021, 02:01
Hace poco más de un año, antes de que una criatura aún más pequeña irrumpiera en nuestras vidas, uno podía comprarse un chihuahua en un criadero por unos 500 euros. Hoy el precio es del doble en los negocios autorizados para vender perros (otra cosa es el comercio entre particulares en Internet). No sucede sólo con chihuahuas, sino con todo tipo de razas: yorkshire, teckel, bichón maltés, golden retriever... «Llevo 35 años criando perros y nunca había visto algo así. Ahora mismo la gente paga lo que les pidan», asegura Manuel Fernández del Río, del criadero Los Ferreros, en Soto de Ribera. «En el último año, nuestros precios han crecido un 100%», afirma Iván Merás, de Las Almenas (Gijón).
La pandemia de la covid ha disparado la demanda de canes: la gente tiene más ahorros y pasa más tiempo en casa, lo que suele estimular los ánimos (sobre todo los de los más pequeños de la familia) a hacerse con una mascota. «Tengo una lista de espera tremenda... Por ejemplo, más de 40 personas esperando por un caniche», señala Manuel.
Pero hay una razón más determinante y compleja: el mayor control de las fronteras nacionales ha rebajado notablemente la importación de los llamados «perros del Este».
¿Perros del Este? Sí, así se conoce a los canes procedentes de países como Hungría, Eslovaquia o la República Checa. Sus precios suelen ser bastante bajos, y los vendedores profesionales critican duramente las condiciones en que son comercializados. «Los crían en macrofábricas y vienen en grandes camiones, en jaulas... Al mes de nacer los separan de la madre, lo cual puede provocar problemas de conducta», explica Cristabel Castro, dueña de Canbo Kennel, en Bodenaya (Salas), donde vende pastores alemanes y border collies con un enfoque opuesto: «Entrevisto a las personas que quieren comprar para saber qué tipo de vida hacen, si les gusta pasar tiempo en el campo y si el perro va a crecer en unas circunstancias adecuadas».
En los últimos años ha habido varias operaciones policiales en España para desarticular tramas de tráfico ilegal de perros procedentes del este europeo. Un problema que se suma al del abandono de estos animales (más de 183.000 en 2019) y a las estafas de ventas por Internet. «Esto sucede cada vez más. Ves un anuncio en el que te enseñan fotos del perro, te piden un dinero de adelanto y al final... ni perro ni dinero», cuenta Manuel Fernández. A Cristabel le tocó muy de cerca una vez: «Utilizaron fotos de nuestros cachorros para vender por Internet. Me hice pasar por compradora y les dije que ese anuncio era mentira, que ese perro había nacido en mi casa».