Los indianos llenan Trasona de fiesta y color blanco
Sobre 700 personas acudieron a la comida de hermandad que recupera todo su esplendor con un gran ambiente festivo
FERNANDO DEL BUSTO
Lunes, 31 de julio 2023, 00:47
Algo más de 700 personas acudieron ayer a la comida indiana organizada en Trasona, con el blanco, pamelas, sombreros panamá la más hermosa estética de los años veinte para la celebración. Tan sólo el párroco, Constantino Bada, vestía el clerigman negro pero, si era necesario, disponía a mano de la guayaba blanca como si fuese un sacerdote en un país tropical.
Con casi doscientos participantes más que el año pasado, es evidente que la fiesta sigue arraigando ya que s acercan a ella tanto vecinos de Trasona o personas que, en algún momento de su vida, residieron en la parroquia corverana. Sobre la marcha, se improvisó alguna mesa más para acoger a toda la gente que acudía. Durante esas horas, aparcar en Trasona era realmente complicado.
Entre las fijas se encuentran las hermanas Rosi y Loli Rodríguez Ortega que, allá por 2004, tuvieron la idea de hacer la primera comida de indianos. «En una casa de Trasona vimos una comida de indianos, todos debajo de un árbol y celebrando una fiesta. Pensamos que era una buena idea y nos animamos», comentaban ayer.
La buena acogida no compensó el esfuerzo y, desde entonces, pasaron la responsabilidad de la organización a la Sociedad de Festejos de Trasona (Sofetra), con Bernardo Duarte al frente y el apoyo del Ayuntamiento de Corvera, que ayer estuvo representado por el concejal Luis Rafael Alonso, cumpliendo la uniformidad requerida.
«Lo están haciendo muy bien y cada vez viene más gente», destacaban las hermanas. El programa de ayer, incluía la misa y el almuerzo previsto para las 14:30 horas y donde, media hora después del inicio, seguía un goteo de personas que se acercaban, todas ellas con el blanco dominando en su vestuario.
Entre los alicientes, la carroza de Sofetra en las fiestas de Trasona, dispuesta para que todo el que quisiera tuviese un original recuerdo de la fiesta. Allá estaba Daniel Chedas fotografiando a su hijo Leo, que debutaba en la fiesta, junto con su madre Haydée Cascales y los abuelos maternos Geli Argüelles y Pedro. «Durante muchos años vivimos en Trasona, pero mis padres están ahora en Avilés y yo en Vitoria. Aprovechamos la fiesta para regresar, nos encanta el ambiente».
Pero son muchos más los que regresan a Trasona durante esta jornada, como es el caso de los hermanos Rosi e Isidro Fernández Pérez, conocidos en la parroquia por ser hijos de Isidro y Florina. Cuestiones laborales, llevaron a Isidro a Viveiro, en Lugo, donde aún reside con su esposa Ana de la Calle. Por su parte, Rosi vive en Avilés junto con su esposo, Ricardo Calzón que, como anécdota, es un asturiano nacido en Moscú, uno de los 'niños de la guerra'. Los cuatro coinciden en que les encanta la fiesta y que acuden siempre es posible.
A primera hora de la tarde, un grupo de mayores de las residencias próximas a Trasona se acercó hasta la carpa donde se desarrollaba la comida para disfrutar del ambiente.
La sobre mesa fue animada por la orquesta Pasito Show y el dúo Brass. El programa tenía previsto que la música cesase a eso de las once de la noche, pero habida cuenta del buen ambiente que hubo a lo largo de toda la tarde y las ganas de diversión de los asistentes, todo apuntaba a que se alargaría un rato más de lo estipulado.