Carmen Yáñez: «Este libro es seguir estando con Lucho»
La viuda de Luis Sepúlveda compartió con el público sus vivencias junto al escritor chileno acompañada de Alejandro CéspedesEl recinto de la Semana Negra se llenó de historias sórdidas y felices, debates y poesía en el último día de 'petazo' antes de que el festival baje hoy el telón y diga adiós al astillero
Volvía a estar presente Luis Sepúlveda en la Semana Negra de la mano de Carmen Yáñez, la mujer que amó y que le amó y la mujer que le ha dedicado un libro honesto que les cuenta a ambos y que arranca cuando ella tenía 16 años y en Santiago de Chile les presentó su hermano. «Yo valgo dos botellas de vino», bromeó, porque fue eso lo que Sepúlveda tuvo que comprar para que se produjera esa cita. Ayer ocupó lugar en la Carpa de la Palabra acompañada por el poeta Alejandro Céspedes para presentar 'Un amor fuera del tiempo', que así se titula la obra que se presentó de la mano del Aula de Cultura de EL COMERCIO. Fue el poeta quien explicó las razones de la escritura de Yáñez, que se aferra al recuerdo para saber vivir y «para reinventarse». Nace del duelo y del amor un libro que es «palabra sin artificio», en la voz de Céspedes. «El recuerdo que siempre es intangible se vuelve en Carmen Yáñez materia moldeable», dijo.
Resaltó también el tono de un libro que parece ubicar al lector en el salón de la casa que ella y Sepúlveda compartieron en Somió. Cuenta su vida con «la intimidad de una amiga que se confiesa ante cada uno de nosotros por separado» en una tarde de lluvia. Lo hace además con la delicadeza de una abuela que habla del país en el que vivió, el hombre al que amó y lo que perdió. Lo hace sin caer en lo anecdótico, mezclando lo cotidiano con la trascendente. Con ella una historia de amor es también un relato político que reivindica el valor de la palabra. Porque amar también es una forma de militancia.
Ese Lucho familiar se abre camino en una obra imposible de clasificar en la que la voz honesta de Yáñez es la seña de identidad fundamental. Las hermosas palabras de Céspedes arrancaron un acto en el que ella procedió a la leer una parte de su libro, bajo el título de 'Solo en casa', que recoge una carta que él le envía contando sus quehaceres en su ausencia. Y esa carta también es una manera de contar su sensibilidad, su forma de estar en el mundo. «Todo en orden en Gijón, pero me faltas mucho Pelusita», ha quedado escrito. Y cuando ella lo leyó se le quebró la voz ante la carpa abarrotada de público escuchando atento. Llegó después la explicación de esas misivas llenas de humor ácido que le enviaba. «Cuando estoy triste recuerdo estos episodios y vuelvo a la vida, vuelvo a la lucha, a renacer un poquito», confesó. «Este libro es seguir estando con él», dijo quien comenzó a escribirlo durante la pandemia que se lo llevó.