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Juan Magán hace la fiesta mayúscula
La banda The Sacred Souls seduce en la plaza Mayor en una noche con fin de fiesta apoteósico en Poniente con el rey del electrolatino
Los grandes conciertos de la Semanona se coronaban anoche con una doble sesión de auténtico lujo para velar armas en la víspera de los Fuegos: la banda californiana The Sacred Souls llenaba la plaza Mayor con sus cálidos e impecables sonidos negros y dos horas más tarde era el rey del electrolatino, Juan Magán, quien ponía a bailar al público de Poniente. Un excelente plan para una velada de 'rebequina' o sudadera que la música en vivo volvió a ambientar de buen rollo y energía.
Fueron realmente afortunados los espectadores de la plaza consistorial al poder disfrutar de uno de los grupos más celebrados del neo soul estadounidense. Alex García, en la batería y coros, Sal Samano al bajo y el extraordinario vocalista Josh Lane forman el trío angular de The Sacred Souls, que anoche desplegó toda su magia acompañado por su banda: Riley Dunn en el piano, Shay Stulz en la guitarra y las voces de Astyn Turrentine y Viane Escobar.
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Abrieron con su balada 'Overflowing', y de ahí fueron directos al baile con 'Love is the way'. El cantante se bajó entre la gente para compartir 'Will I see you again', y con una de las coristas haciendo del sofoco ambiental arte del abanico se lanzaron a los ritmos funkies de 'Easier said than done'. Los de San Diego fueron seduciendo poco a poco a la plaza entera y dejaron momentazos como el de su reciente 'Lucid Girl' o la joya 'Happy & Well'.
Lo de la noche fue otra historia. Juan Magán batió todos los récords de asistencia con una auténtica bacanal de miles de adolescentes copando Poniente. Un delirio estalló con solo oír su nombre. La fiesta estaba hecha y se extendió como la pólvora por todas las gargantas al sonar 'Ella no sigue modas', 'Quiero bailar contigo', 'De noche y de día' o 'Como yo', con ríos de personas aún accediendo a la explanada y con centenares de móviles en alto capturando cada movimiento.
La mega-fiesta al son del rey del electrolatino siguió con 'Soy un don' y 'He llorado' para extenderse largamente en el que ya ha sido el 'conciertazo' de la Semanona.