Las vidrieras de la fachada de la Iglesiona recuperan su luz

Dos meses después de su desmontaje y traslado al taller del vidriero artístico Gerardo García (Vitrales Artísticos Vitralia), en Madrid, donde se llevó a cabo una limpieza y recuperación integral de las tres vidrieras de la fachada principal de la basílica del Sagrado Corazón, las tres piezas han vuelto ya a casa. Desde hace unos días lucen con más esplendor, sin la pátina de la suciedad acumulada durante décadas que las oscurecía. La intervención ha permitido recuperar la visión mucho más nítida de las policromías de unos vitrales que están dedicados al Sagrado Corazón, el Ángel del Detente y el Ángel de la Adoración Nocturna.

«Estamos muy contentos con el resultado», comenta el rector de la 'Iglesiona', Manuel Robles, tras hacer ver la diferencia entre las vidrieras ya recuperadas y las que decoran los muros laterales del templo. También los habituales de la basílica le han trasladado su satisfacción por el resultado de los trabajos de recuperación: «Sí, sí que han notado el cambio». Además de su limpieza, también se han resuelto los problemas de abombamiento que presentaban dos de las piezas en su parte inferior y se han mejorado los sistemas de anclaje de los vidrios.

Los feligreses han sido en buena parte artífices de esta «necesaria» intervención para mejorar el estado de las vidrieras de estilo modernista. Con sus donaciones, agradece el rector de la basílica, se ha conseguido recaudar 8.000 de los cerca de 30.000 euros que, en total, han costado los trabajos.

Las tres piezas sobre las que se ha actuado tienen forma alargada y, en conjunto, suman 45 metros cuadrados. Pero la 'Iglesiona' tiene en total 200 metros cuadrados de vidrieras. «Son las mayores de Asturias y las más valiosas por su elaboración artística». Obra de la francesa Casa Maumejean Hermanos, fueron colocadas en 1920, cuatro años antes de la inauguración del templo. Sin embargo, al poco tiempo hubo que reponerlas prácticamente todas porque del asalto e incendio del templo en 1930 solo se salvaron dos.

La intención es ir restaurando el resto de vidrieras poco a poco. Es una labor que al rector de la basílica le gustaría continuar una vez finalicen los actos que se van a organizar con motivo del centenario del templo desde el próximo día 30 hasta mayo de 2025. Para recabar donaciones ya han abierto una cuenta. También se pueden realizar por bizum.