Douglas S. Massey: migración, fronteras y justicia social


El sociólogo y demógrafo estadounidense Douglas Steven Massey (Washington, 1952) ha sido galardonado con el Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2025 en reconocimiento a su enfoque multidisciplinar que ha ilustrado temas fundamentales como la migración internacional, la segregación residencial y la estratificación social.
«Ha construido un modelo teórico del más exigente rigor
académico, que nos permite interpretar
las sociedades contemporáneas —en
las que las migraciones
se han vuelto un factor estructural— con
una mirada sosegada, racional y empática»
Massey se licenció en 1974 en Sociología, Psicología y Español por la Western Washington University, y obtuvo su máster (1977) y doctorado (1978) en Sociología
por la Universidad de Princeton.
Es profesor Henry G. Bryant de Sociología y Asuntos Públicos
en Princeton, donde también ha dirigido el Office of Population Research y el Programa de Estudios de Población.
Una de sus aportaciones más influyentes es la participación
en proyectos como el Mexican Migration Project (desde 1982)
y el Latin American Migration Project, iniciativa que lidera junto con Jorge Durand para generar datos empíricos sobre los flujos migratorios entre México, otras naciones latinoamericanas y Estados Unidos. Estas bases de datos, resultado de encuestas detalladas y trabajo de campo prolongado, han permitido observar rutas migratorias, decisiones familiares, redes sociales y cómo las políticas de migración impactan vidas reales.
«La mayor amenaza
para una política migratoria exitosa
y para el bienestar de las naciones
es el auge de los demagogos que retratan a los inmigrantes
como criminales
o parásitos»
Activistas protestan contra las
políticas del Gobierno estadounidense
frente a las oficinas del Servicio
de Inmigración y Control de Aduanas,
en Nueva York (26 de julio del 2018).
DREW ANGERER / AFP
Entre sus obras más reconocidas
se encuentra ‘American Apartheid: Segregation and the Making of the Underclass’ (1993), escrita junto con Nancy A. Denton, que examina cómo la segregación residencial
en Estados Unidos entre razas no
es solo un reflejo de desigualdad económica, sino una estructura
que reproduce la pobreza. También ‘Beyond Smoke and Mirrors: Mexican Immigration in an Era
of Economic Integration’ (2002), junto con Jorge Durand y
Nolan Malone, que analiza
cómo las políticas migratorias
estadounidenses en tiempos de globalización, a menudo, no se corresponden con las realidades sociales. Otro libro significativo
es ‘Return to Aztlan’ (1987), que explora los procesos sociales detrás de las migraciones desde México hacia EE. UU.
Massey ha ocupado altos cargos institucionales: fue presidente
de la Population Association of America en 1996, de la American Sociological Association en
2000-2001, y de la American Academy of Political and Social Science entre 2006 y 2015.
Es miembro de prestigiosas academias como la Academia Nacional de Ciencias de EE. UU.,
la Academia Americana de
Artes y Ciencias, la Academia Europea y la Sociedad Filosófica Estadounidense.
UN PENSADOR
CRÍTICO
Su investigación no se ha quedado en la teoría y ha llegado a tener repercusiones políticas: mantiene una crítica constante
a las políticas migratorias que
criminalizan a los migrantes y aboga por visiones basadas en evidencia, ética y justicia social. Su modelo permite entender cómo la migración no es
un fenómeno marginal sino
estructural, ligado al fallo
de ciertos mercados laborales, a la desigualdad, a la segregación residencial, a
la discriminación
racial y a las barreras
estructurales de integración.
Una persona golpea
una piñata con la imagen
del presidente estadounidense
Donald Trump durante una
protesta con motivo del Día
del Trabajo en Chicago, Illinois,
(1 de septiembre de 2025).
REUTERS/JIM VONDRUSKAP
Este enfoque cobra especial relevancia en el contexto actual
de Estados Unidos, donde
las políticas migratorias
han experimentado un
endurecimiento sin
precedentes.
Desde comienzos de
2025, la población inmigrante total del
país ha disminuido
por primera vez en
más de medio
siglo, pasando de
millones
en enero
millones
en junio
Esta caída, superior a
1,4 millones depersonas, se atribuye tanto a deportaciones como
a salidas voluntarias
ante el incremento
de las restricciones
legales y administrativas.
Las deportaciones y arrestos también se han disparado:
en los primeros cien días del nuevo mandato de Trump, se registraron más de 151.000 arrestos de personas indocumentadas y 135.000 deportaciones, según el Transactional Records Access Clearinghouse de la Universidad
de Syracuse. Además, se han endurecido los procesos de inmigración legal, con el aumento de tasas, la ralentización de visados y la revocación de protecciones como el Temporary Protected Status (TPS), que amparaba a miles de personas procedentes de países latinoamericanos y del Caribe.
Dentro de este escenario, las investigaciones de Massey adquieren una perspectiva renovada. Sus modelos
teóricos explican cómo las migraciones responden a dinámicas estructurales de
interdependencia económica, desigualdad y demanda laboral, desmontando los discursos políticos que las presentan como
una amenaza. Desde su análisis empírico y su compromiso ético, Massey ofrece una lectura
racional y humanista frente a
un clima político dominado por
la desinformación y el miedo.

El sociólogo y demógrafo estadounidense Douglas Steven Massey (Washington, 1952) ha sido galardonado con el Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2025 en reconocimiento a su enfoque multidisciplinar que ha ilustrado temas fundamentales como
la migración internacional, la segregación residencial
y la estratificación social.
«Ha construido un modelo teórico del
más exigente rigor académico, que nos permite interpretar
las sociedades contemporáneas —en las que las migraciones
se han vuelto un factor estructural— con
una mirada sosegada, racional y empática»
Massey se licenció en 1974 en Sociología, Psicología y Español por la Western Washington University, y obtuvo su máster (1977) y doctorado (1978) en Sociología por
la Universidad de Princeton. Es profesor Henry G. Bryant de Sociología y Asuntos Públicos en Princeton, donde también ha dirigido el Office of Population Research y el Programa de Estudios de Población.
Una de sus aportaciones más influyentes es la participación en proyectos como el Mexican Migration Project (desde 1982) y el Latin American Migration Project, iniciativa que lidera junto con Jorge Durand para generar datos empíricos sobre los flujos migratorios entre México, otras naciones latinoamericanas y Estados Unidos. Estas bases
de datos, resultado de encuestas detalladas y trabajo
de campo prolongado, han permitido observar rutas migratorias, decisiones familiares, redes sociales y cómo las políticas de migración impactan vidas reales.
«La mayor amenaza
para una política migratoria exitosa y
para el bienestar de las naciones es el auge de los demagogos que retratan a los inmigrantes como criminales o parásitos»
Activistas protestan contra las políticas del Gobierno
estadounidense frente a las oficinas del Servicio de
Inmigración y Control de Aduanas, en Nueva York
(26 de julio del 2018). DREW ANGERER / AFP
Entre sus obras más reconocidas se encuentra ‘American Apartheid: Segregation and the Making of the Underclass’ (1993), escrita junto con Nancy A. Denton, que examina cómo la segregación residencial
en Estados Unidos entre razas no es solo un reflejo de desigualdad económica, sino una estructura que reproduce la pobreza. También ‘Beyond Smoke and Mirrors: Mexican Immigration in an Era of Economic Integration’ (2002), junto con Jorge Durand y Nolan
Malone, que analiza cómo las políticas migratorias estadounidenses
en tiempos de globalización, a menudo, no se corresponden con las
realidades sociales. Otro libro significativo es ‘Return to Aztlan’ (1987), que explora los procesos sociales detrás de las migraciones desde México hacia EE. UU.
Massey ha ocupado altos cargos institucionales: fue presidente de la Population Association of America en 1996, de la American Sociological Association en 2000-2001, y de la American Academy of Political
and Social Science entre 2006 y 2015. Es miembro de prestigiosas academias como la Academia Nacional de Ciencias de EE. UU., la Academia Americana de Artes y Ciencias, la Academia Europea
y la Sociedad Filosófica Estadounidense.
UN PENSADOR
CRÍTICO
Su investigación no se ha quedado en la teoría y ha llegado a tener repercusiones políticas: mantiene una crítica constante a las políticas
migratorias que criminalizan a los migrantes y aboga
por visiones basadas en evidencia, ética y justicia social. Su modelo permite entender cómo la migración no es un fenómeno marginal sino estructural, ligado al fallo de ciertos mercados laborales, a la desigualdad, a la segregación residencial, a la discriminación racial y a las barreras estructurales de integración.
Una persona golpea
una piñata con la imagen
del presidente estadounidense
Donald Trump durante una
protesta con motivo del Día
del Trabajo en Chicago, Illinois,
(1 de septiembre de 2025).
REUTERS/JIM VONDRUSKAP
Personas participan en una protesta
contra el ICE en Chicago, Illinois, el 9
de septiembre de 2025. El Servicio de
Inmigración y Control de Aduanas de
Estados Unidos (ICE) ha puesto en marcha
operaciones en Chicago para perseguir
a los inmigrantes indocumentados que
han cometido delitos. EFE/EPA/ABLE URIB
Este enfoque cobra especial relevancia en el contexto actual
de Estados Unidos, donde las políticas migratorias han experimentado un endurecimiento sin precedentes.
Desde comienzos de 2025, la población inmigrante total del país ha disminuido
por primera vez en más
de medio siglo, pasando de
millones
en junio
millones
en enero
Esta caída, superior a
1,4 millones de personas,
se atribuye tanto a
deportaciones como a
salidas voluntarias ante
el incremento de las restricciones legales
y administrativas.

El sociólogo y demógrafo estadounidense
Douglas Steven Massey (Washington, 1952) ha
sido galardonado con el Premio Princesa de Asturias
de Ciencias Sociales 2025 en reconocimiento a su enfoque multidisciplinar que ha ilustrado temas fundamentales como la migración internacional, la segregación residencial y la estratificación social.
«Ha construido un modelo teórico
del más exigente rigor académico, que nos permite interpretar las sociedades contemporáneas —en las que las migraciones se han vuelto un factor estructural— con una mirada sosegada, racional y empática»
Massey se licenció en 1974 en Sociología, Psicología y Español
por la Western Washington University, y obtuvo su máster (1977) y doctorado (1978) en Sociología por la Universidad de Princeton. Es profesor Henry G. Bryant de Sociología y Asuntos Públicos en Princeton, donde también ha dirigido el Office of Population Research y el Programa de Estudios de Población.
Una de sus aportaciones más influyentes es la participación
en proyectos como el Mexican Migration Project (desde 1982) y
el Latin American Migration Project, iniciativa que lidera junto con Jorge Durand para generar datos empíricos sobre los flujos migratorios entre México, otras naciones latinoamericanas
y Estados Unidos. Estas bases de datos, resultado de encuestas detalladas y trabajo de campo prolongado, han permitido observar rutas migratorias, decisiones familiares, redes sociales
y cómo las políticas de migración impactan vidas reales.
«La mayor amenaza
para una política migratoria exitosa y
para el bienestar de las naciones es el auge de los demagogos que retratan a los inmigrantes como criminales o parásitos»
Activistas protestan contra las políticas del Gobierno
estadounidense frente a las oficinas del Servicio de
Inmigración y Control de Aduanas, en Nueva York
(26 de julio del 2018). DREW ANGERER / AFP
Entre sus obras más reconocidas se encuentra ‘American Apartheid: Segregation and the Making of the Underclass’ (1993), escrita junto con Nancy A. Denton, que examina cómo la segregación residencial en Estados Unidos entre razas no es solo un reflejo de desigualdad económica, sino una estructura que reproduce la pobreza. También ‘Beyond Smoke and
Mirrors: Mexican Immigration in an Era of Economic Integration’ (2002), junto con Jorge Durand y Nolan Malone, que analiza cómo las políticas migratorias estadounidenses en
tiempos de globalización, a menudo, no se corresponden con las realidades sociales. Otro
libro significativo es ‘Return to Aztlan’ (1987), que explora los procesos sociales detrás de
las migraciones desde México hacia EE. UU.
Massey ha ocupado altos cargos institucionales: fue presidente de la Population Association
of America en 1996, de la American Sociological Association en 2000-2001, y de la American Academy of Political and Social Science entre 2006 y 2015. Es miembro de prestigiosas academias como la Academia Nacional de Ciencias de EE. UU., la Academia Americana de
Artes y Ciencias, la Academia Europea y la Sociedad Filosófica Estadounidense.
UN PENSADOR
CRÍTICO
Una persona golpea
una piñata con la imagen
del presidente estadounidense
Donald Trump durante una
protesta con motivo del Día
del Trabajo en Chicago, Illinois,
(1 de septiembre de 2025).
REUTERS/JIM VONDRUSKAP
Su investigación no se ha quedado
en la teoría y ha llegado a tener repercusiones políticas: mantiene
una crítica constante a las políticas migratorias que criminalizan a
los migrantes y aboga por visiones basadas en evidencia, ética
y justicia social.
Su modelo permite entender cómo
la migración no es un fenómeno marginal sino estructural, ligado
al fallo de ciertos mercados laborales, a la desigualdad, a
la segregación residencial, a
la discriminación racial y
a las barreras estructurales
de integración.
Personas participan
en una protesta contra
el ICE en Chicago, Illinois,
el 9 de septiembre de 2025.
El Servicio de Inmigración
y Control de Aduanas de
Estados Unidos (ICE) ha
puesto en marcha operaciones
en Chicago para perseguir
a los inmigrantes indocumentados
que han cometido delitos.
EFE/EPA/ABLE URIB
Este enfoque cobra especial
relevancia en el contexto actual
de Estados Unidos, donde las políticas migratorias han experimentado un endurecimiento sin precedentes.
Desde comienzos de 2025, la población inmigrante total del país ha disminuido
por primera vez en más
de medio siglo, pasando de
millones
en junio
millones
en enero
Esta caída, superior a 1,4 millones de personas, se atribuye tanto a deportaciones como
a salidas voluntarias ante el incremento de las restricciones legales y administrativas.
Las deportaciones y arrestos también se han disparado: en los primeros cien días
del nuevo mandato de Trump, se registraron más de 151.000 arrestos de personas
indocumentadas y 135.000 deportaciones, según el Transactional Records Access Clearinghouse de la Universidad de Syracuse. Además, se han endurecido los procesos de inmigración legal, con el aumento de tasas, la ralentización de visados y la revocación de protecciones como el Temporary Protected Status (TPS), que amparaba a miles de personas procedentes de países latinoamericanos y del Caribe.
Dentro de este escenario, las investigaciones de Massey adquieren una perspectiva renovada. Sus modelos teóricos explican cómo las migraciones responden a dinámicas estructurales de interdependencia económica, desigualdad y demanda laboral, desmontando los discursos políticos que las presentan como una amenaza. Desde su análisis empírico y su compromiso ético, Massey ofrece una lectura racional y humanista frente a un clima político dominado por la desinformación y el miedo.