Dos asturianos en el Imperio del Sol Naciente

España tendrá mañana un rival exótico, «aunque cada vez más europeo». Álex Barrera y José Aurelio son dos asturianos que juegan en la Liga nipona. El primero lo hizo en el Sporting más de sesenta partidos oficiales y el segundo se formó en las categorías inferiores del TSK Roces antes de recalar en la cantera del Barcelona.

«Viven el fútbol de manera distinta, son muy disciplinados y, pese a lo que la gente pueda pensar, son buenos jugadores», destaca Barrera. Actualmente el de Viella tantea la posibilidad de seguir ligado al FC Ryukyu, equipo que acaba de descender de la J2 League, la Segunda División nipona. Por su lado, José Aurelio defiende la portería del Tokushima Vortis, equipo de la segunda categoría nipona y con quien tiene aún dos años más de contrato. «Tienen una forma de ser muy recta y eso lo trasladan al fútbol. En Europa somos más viscerales. Entonces hay cosas que nos chocan», explica el gijonés.

Hace unos días Japón venció a Alemania en una de las sorpresas de la Copa del Mundo de Qatar. «El nivel de Primera División es más alto que el de Segunda, hay muchos brasileños que suben el nivel y aún les queda por entender mejor la táctica», explica José Aurelio, quien cree que además «no aprovechan las ventajas que tienen en el juego». Para Barrera, la presión es fundamental. «La afición no es tan exigente como la europea, pero están saliendo jugadores muy rápidos y habilidosos que dan el salto a Europa y por eso en la selección están dando un paso adelante».

Los de Luis Enrique los tendrán en frente mañana. Ambos futbolistas ven difícil ver otra sorpresa como la de Alemania porque «con Luis Enrique es imposible salir dormidos». De eso algo sabe José Aurelio. «Tuve la suerte de coincidir con él en dos pretemporadas y quedabas tonto escuchándolo hablar y como persona es súper cercano», dice el portero sobre el seleccionador.

El fútbol es el segundo deporte en Japón. «Primero es el béisbol y donde yo estaba en Okinawa también hay mucha afición al baloncesto», explica Barrera. Los japoneses viven intensamente los encuentros y animan durante los noventa minutos. «Take Kubo es una referencia allí para todos los niños», dice José Aurelio.

En cuanto a los entrenamientos existen curiosidades con respecto a España. «Lo llevan todo milimetrado. En una hoja tienen apuntado en que minuto van a hacer una cosa u otra, incluso cuando se va a beber», dice Barrera. En el caso de José Aurelio, le costó hacerse con los balones. «Los hinchan muchísimo, parecían medicinales. Los primeros días tuve problemas con sobrecargas en las piernas de lo que pesaban».

Las culturas europeas y asiáticas son completamente distintas y cuestiones que allí son corrientes aquí nos parecerían extrañas. «Se duchan antes de entrenar y cada uno lleva su mochila con su agua y sus cosas, son súper higiénicos para todo», dice José Aurelio. A Barrera le llamó la atención lo educados que son y cómo tras cada entrenamiento se aplauden para darse ánimos.

Japón se mide a España mañana con la esperanza de dar de nuevo una sorpresa mayúscula en el Mundial de Qatar.

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