Langreo inicia los trabajos de saneamiento de la estructura metálica de Talleres del Conde

Los trabajadores, que ya han procedido a limpiar de maleza toda la parcela, se afanaban ayer en sanear el gran armazón metálico librándolo de óxido y de las piezas inservibles, que no pueden ser recuperadas.

Mientras avanzan los trabajos, el Consistorio ultima el modelo de gestión que tendrá el futuro recinto ferial langreano. Por el momento, según el titular de Urbanismo, la apuesta es «una gestión directa que se llevará desde el propio Ayuntamiento, si bien esta pendiente aún de debate y de discusión». No descarta que «podamos abrirnos a otro tipo de gestión o colaboración». Si bien la intención municipal es programar allí las distintas actividades y ferias que el Consistorio organiza a lo largo del año, aunque «estará abierta a la iniciativa privada, que previo pago de un alquiler de los espacios que vayan a utilizarse».

Las antigua naves de Metalsa se convertirán en un año en un moderno espacio multiusos. En el proyecto se destaca que «la idea de construir un recinto ferial parte de la necesidad de crear un espacio expositivo de carácter polivalente y dotar de la calidad de servicios necesaria que, en la actualidad, exige el desarrollo del municipio de Langreo». De este modo, la instalación se diseña fijando como punto de partida el edificio existente que recoge la memoria industrial de la comarca. «Se parte de aunar el pasado y el futuro utilizando como contenedor las estructuras metálicas de las antiguas naves de Talleres del Conde».

El documento indica que se concibe el proyecto «como una serie de espacios capaces de funcionar de modo independiente o conectados entre sí mediante paneles móviles que sectorizan o dan continuidad a los recorridos, en función de las diferentes necesidades de uso para albergar los recintos de exposición u otros usos que, en función de las necesidades, se articulen y se puedan ir acomodando».

Según consta en la memoria técnica, el futuro pabellón del recinto ferial contará con una superficie útil de poco más de 2.800 metros cuadrados repartidos en dos plantas; la principal será la baja con casi 2.700. El proyecto se financia con cargo al Plan del Carbón.