El Principado de Asturias garantiza «todo el apoyo» a la plantilla de Hunosa

«Esta fue una reunión muy clarificadora de en qué punto estamos de cara a esa importantísima reunión del día 7, con presencia de la SEPI, propietaria de Hunosa, nosotros hacemos una apuesta firme y contundente porque tenga futuro, viabilidad y las oportunidades que se merece», aseguró Adrián Barbón. Fue con él con quien el SOMA y CC OO mantuvieron la primera del amplio calendario de encuentros que se han marcado para captar el mayor apoyo posible antes de la reunión prevista para el mes próximo.

«La negociación nos preocupa. Nos preocupa que fructifique como debe: en un plan de empresa que dé viabilidad y futuro a Hunosa, que dé seguridad a los trabajadores y que permita esa transformación hacia una nueva Hunosa teniendo en cuenta la realidad a la que vamos. Todo el apoyo del Gobierno que presido», insistió Barbón, quien recordó que soy vecino de las cuencas, mi vinculación con la familia minera es total. Soy hijo y nieto y sobrinos de mineros, todos trabajadores de Hunosa«.

Sobre cuál será su papel, el presidente asturiano anunció un «escrupuloso respeto a los agentes negociadores, tanto a la parte sindical como a la empresarial», pero dejó claro que «trasladaré a la SEPI y al Gobierno de España la importancia que para nosotros tiene Hunosa, la importancia de estas negociaciones que se reabren tras este fracaso, con ese preacuerdo que no pudo fructificar». «Quiero un acuerdo que sea satisfactorio para las cuencas mineras y para el futuro de Asturias», sentenció.

La misma sintonía mostró Ovidio Zapico en su encuentro con los portavoces sindicales. Se reunió el también consejero de Ordenación del Territorio con José Luis Alperi y Damián Manzano en la sede de IU en Oviedo, desde la que anunció «la presentación de una Proposición no de Ley en la Junta». Según explicó, Convocatoria por Asturias quiere con esa propuesta «instar, a través de nuestro grupo parlamentario, a la SEPI para que esa negociación que va a tener lugar a partir de enero se aborde con seriedad, desde el realismo y con garantías y, sobre todo, con un planteamiento de futuro para Hunosa».

Como Barbón, también ligó Zapico el futuro de Hunosa con el de Asturias, ya que, dijo, «debe demostrar que la transición energética puede ser justa. La SEPI tiene la responsabilidad de que eso sea así». De hecho, apuntó que «difícilmente se puede pedir al capital privado que se implique en ese cambio de modelo con un compromiso de no dejar a nadie atrás si, desde lo público, , no se actúa también con criterios de justicia social con los trabajadores y los territorios». En su opinión, «ahora tenemos una ocasión de oro para demostrar desde lo público que eso puede ser posible y, también, para poner el listón muy alto».

Los portavoces sindicales se mostraron satisfechos tras ambos encuentros. El más crítico con el Principado, el portavoz del SOMA, José Luis Alperi, destacó «el apoyo político total y absoluto» para el diseño del plan de empresa que responda a las exigencias para lograr la sostenibilidad de la actividad de Hunosa, en el marco de una transición justa. «Todos coincidimos en que es un momento crucial para Hunosa. Cuando conseguimos salvar la fecha el 31 de diciembre de 2018 lo hicimos plasmando en una primera parte del plan de empresa la transformación de la empresa pública en una empresa energética y medioambiental. En eso estamos y en eso seguimos desde las organizaciones sindicales y creemos y así se lo hemos hecho saber al Gobierno de Asturias que es una herramienta fundamental para alinearlo con su estrategia energética industrial y medioambiental».

Asturias, defendió Alperi, no puede permitirse desaprovechar las ventajas competitivas de Hunosa: «Creemos que sería un error mayúsculo el que no se vigilase que la negociación del plan de empresa de hunosa la dota de futuro». Además, pidió responsabilidad a la compañía para poner en marcha proyectos que permitan dar viabilidad a Hunosa. «Esperamos que el día 7 de enero haya un punto de inflexión importante, que realmente empecemos a negociar el futuro para Hunosa, para los territorios, para los trabajadores y para Asturias».

Desde CC OO, su portavoz Damián Manzano cree que el futuro de Hunosa va más allá una cuestión de interés sindical, para los trabajadores o para la propia compañía: «Estamos ante un problema de Estado». Así, ha enfatizado, «si alguien había caído en la tentación de darle menos importancia de la que tenía a futuro en nuestra comunidad, estaba cayendo en un gravísimo error, tanto si era desde la empresa aquí en Asturias, tanto si era por parte de su máximo accionista, la SEPI, o si era directamente desde el ámbito del Gobierno de España».

El líder de CCOO de Industria destacó que hay una «oportunidad» para dar una solución a Hunosa, pagar la «deuda histórica» con Asturias y, también, en el contexto de asegurar una transición justa, algo para lo que existe consenso político y social. «Estamos en una oportunidad de afrontar procesos de transición justa y real y no procesos de desmantelamiento de actividad industrial de los que, por desgracia, ya tenemos ejemplos, algunos muy recientes».

También lanzó un mensaje de solidaridad: «que se sepa y que sepan que los trabajadores y trabajadoras de Hunosa no están solos, siguen teniendo y tienen detrás el respaldo social, pero también el respaldo político trasladado hoy por boca del presidente del Principado, y también, no menos importante, por su socio de gobierno»