Coronavirus en Asturias | Barbón: «No criminalizamos a la hostelería, pero en los locales se producen contagios porque todos bajamos las defensas»

El presidente del Principado ha vuelto a hablar de forma más que clara de la situación que vivimos: «Los datos son absolutamente preocupantes. La segunda ola que estamos viviendo de lleno está resultando absolutamente dramática». No solo en Asturias y en España, ha dicho Adrián Barbón, sino en todo el mundo. España supera ahora los 310 casos por 100.000 habitantes de incidencia acumulada en los últimos 14 días; Asturias está ya en 247 y «hay comunidades rozando los 1.000». Así que «todos los países están tomando decisiones». Y Asturias también lo hará.

Por el momento, la región se mantiene en la fase 2 modificada. Este jueves se volverá a reunir el comité de coordinación en el que el Gobierno regional, Delegación del Gobierno y municipios de Asturias analizarán el resultado de las medidas adoptadas en esta primera semana (prohibición de servir en barras, prohibición de venta de alcohol en gasolineras a partir de las diez de la noche, máximo de seis personas por mesa en hostelería, reducción de aforos en zonas comunes de los centros comerciales...) y si es necesario ir más allá.

Barbón tiene muy presentes las cifras, pero no solo eso: «No podemos obviar que el virus sigue siendo un gran desconocido. Por desgracis no tenemos todas las pruebas y tenemos que ir tomando decisiones medida que los expertos nos van transmitiendo la realidad de los informes».

En cuanto a las cifras, el presidente regional tiene un objetivo muy claro que ha repetido en varias ocasiones: reducir la incidencia acumulada por debajo de los 100 casos por 10.000 habitantes y rebajar la tasa de positividad a menos del 5% (la última cifra indica que estamos en el 8,1%).

Barbón ha afrontado también al malestar que sus medidas han provocado en el sector de la hostelería, que incluso ha planteado movilizaciones en señal de protesta. «Como me gusta dar la cara», ha dicho, quiere explicarlo. «No es una cuestión de criminalizar a nadie ni mucho menos. Soy consciente de que la mayoría de los hosteleros mantiene y cumple las normas de seguridad con el debido rigor y lo quiero agradecer y destacar. Pero también es cierto, y lo detectamos por el análisis de brotes y nuevos casos, que los contagios se producen en el ámbito familiar, en el de las relaciones personales privadas o en el ámbito de bares y restaurantes por una razón, no porque los hosteleros hagan las cosas mal, sino porque todos, y me incluyo, bajamos las defensas, nos quitamos la mascarilla, nos acercamos más al resto de personas». Por eso, dijo, se toman ciertas medidas. Y lanzó una advertencia: en varias comunidades «se ha prohibido totamente la actividad». Es decir, «hay que frenar ahora los contagios para no llegar a ese nivel».

Y en el camino, una vez más, «iremos adoptando las necesarias medidas, de acuerdo con la opinión de los expertos».

Insiste Barbón en la gravedad del momento: «La segunda ola está impactando de lleno con una fuerza incomparable. Los datos son malos y es necesario más que nunca la colaboración de todos. Da igual que el gobierno tome medidas si no conseguimos implicar al conjunto de los ciudadanos en esta batalla».

El presidente regional tomará medidas y tratará de que sean compartidas en todo el Estado, a la espera de ese baremo conjunto que espera apruebe Sanidad para que los indicadores y sus consecuencias sean iguales en todas las comunidades autónomas. Es decir, que en función de la incidencia acumulada, la positividad de las PCR, el factor de transmisibilidad del virus, la incidencia en la población mayor de 65 años y el porcentaje de casos de los que se conoce su orgien, así como las cifras de camas hospitalarias y de UCI, el 'semáforo' sea igual para todo el territorio.

El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud se reúne mañana con esta cuestión sobre la mesa.