La cosecha de miel aumenta un 75% y cierra la temporada con 400 toneladas en Asturias

El sector apícola asturiano recupera el pulso. Tras la «catastrófica» campaña de 2018, con pérdidas de cerca del 70%, este año la cosecha de miel alcanza cotas «satisfactorias» que pueden superar las 400 toneladas. Según la Asociación de Apicultores de Asturias, la producción media aumenta un 75% respecto a la registrada en 2018, y pasa de tres a doce kilos de miel de media por colmena.

Esta subida en la producción ofrece «alivio» a la cabaña apícola asturiana pero sigue sin llegar a las cifras que los productores consideran «deseables». Según explicó Santiago Menéndez, presidente de Apicultores Asturianos, «lo ideal sería superar las 500 toneladas por temporada, lo que supone un rendimiento medio de entre 18 y 20 kilos de miel por colmena».

A pesar de la evidente mejoría, la satisfacción del sector es moderada por lo «irregular» de una campaña en la que se alternan zonas con buenos datos de recogida y otras en las que a penas se ha recolectado nada. «Los mejores resultados se han dado en zonas de montaña, donde sí se cosechó una buena cantidad de miel; sin embargo, en otras a media altura, hasta 500 ó 600 metros de altitud, la cosecha fracasó», aseguró Santiago Menéndez.

Esta significativa diferencia de resultados se debe a cambios en la floración de las plantas, con una buena primavera y un verano irregular. En concreto, «las floraciones tempranas, como las del eucalipto, se comportaron bien, mientras las grandes floraciones de verano que son de castaño y zarza tuvieron un comportamiento muy irregular», explicó Menéndez. Estas variaciones en las plantas «limitó la secreción de néctar» disponible para que las abejas trabajasen y se tradujo en que la temporada concluya bien en unos valles y en otros fatal», añade.

Según la Asociación de Apicultores de Asturias, en la comunidad hay más de 1.700 productores que explotan unas 47.500 colmenas. De ellos, cerca de medio centenar son profesionales con dedicación exclusiva. Las zonas con mayor cabaña apícola se localizan en el Suroccidente y en la cordillera central.

Desde Apicultores Asturianos advierten de que «las cosas están cambiando y no para bien». La marcada fluctuación en la cosecha de miel y, por ende, la mayor inestabilidad del sector apícola de la región responden a la confluencia de tres factores: «El cambio climático, la avispa asiática y las importaciones de miel».

Menéndez señaló que «el cambio climático está detrás de las malas cosechas de los últimos dos años, alterando el ciclo de las plantas», a lo que se suma la presencia de especies invasoras como la velutina que «agrava la situación». La importación de miel supone otra de las grandes amenazas para el sector.

En estos momentos «el 65% de la miel que importa España proviene de China. En menor cantidad, llega también de Argentina y otros países como Rumanía, todos ellos con precios mucho más baratos que perjudican al sector nacional», detalla. La importación no afecta tanto a la venta al por menor, que está en torno a los 10 euros el kilo, «porque el público local valora el producto». Pero «sí devalúa el precio del granel que ha caído a unos 3,5 euros el kilo».