Mieres actuará de emergencia para proteger el núcleo turonés de La Crucina

El equipo de gobierno de Mieres (IU) ultima la contratación de una obra de emergencia para limpiar y construir un talud que proteja al núcleo turonés de La Crucina de los constantes argayos. Es más; el vicealcalde, Manuel Ángel Álvarez, informó de que no es el único problema de este tipo en el concejo, y que se trabaja por actuar de forma inmediata en otra tres zonas también afectadas por desprendimientos de piedras y barro. En detalle, se actuará en Cuyiscal (Turón), en Santo Emiliano y en Los Pontones. Aunque todavía no se ha calculado la cuantía total de esos trabajos, se estima que sea elevada. «Estamos a la espera de conocer también si podremos acceder a ayudas por el temporal», agregó el responsable municipal.

El Ayuntamiento trabaja en dar soluciones, pero los vecinos de La Crucina aseguran que llevan meses alertando de esta situación de riesgo. «Nuestro pueblo se viene abajo», se quejaban los afectados el martes. Desde el lunes, cuando se produjo un gran argayo sobre las viviendas, los habitantes de este núcleo dicen sentir «miedo de que la tierra caiga sobre nuestras casas». Marta Baquero lamentaba esta situación ya se veía venir. «Es muy preocupante».

El problema, relataba, se encuentra en la carretera de acceso a la población, que se ubica en una ladera muy cerca del centro urbano, comenzó a resquebrajarse y el agua se filtraba por las grietas.

El vial de acceso a La Crucina está totalmente cortado a los vehículos. Manifiestan los vecinos que no puede pasar; pero lo más grave es que no pueden acceder vehículos de servicios, como los del suministro del gasóleo o los de emergencias, ambulancias o bomberos. La asociación de vecinos Mejoras del Valle recordó, por su parte, que este problema no es nuevo. La presidenta del colectivo, Silvia Suárez, asegura que los residentes de este núcleo «viven con temor a que un argayo caiga sobre sus viviendas, y así no se puede estar, bajo esa constante amenaza».