Educación trata de reducir el malestar y llama al diálogo a todos los sectores

Hace solo unos días, el presidente del Principado, Adrián Barbón, admitía en la Junta General del Principado que el Gobierno regional había cometido errores en la gestión de la pandemia en materia educativa. Hablaba de cambios en la estructura de la Consejería de Educación, después de tres dimisiones en el equipo más cercano a la consejera, y que estos irían encaminados a «reforzar el diálogo con la comunidad educativa». Pues bien, eso ya se ha puesto en práctica.

La consejera, Carmen Suárez, ha iniciado una ronda de contactos «informales» con los diferentes agentes de la comunidad educativa. Los encuentros han comenzado ya esta misma semana, por los sindicatos, que están siendo llamados de forma individual. La intención es hablar con cuantos más agentes, mejor, para tener una radiografía completa de cuáles son los problemas y las demandas en este complicado inicio de curso.

El sindicato UGT ha sido una de las primeras formaciones llamadas a ese encuentro. Se trata de la formación que ha sido quizás la más dura de todas con la consejera y que ha pedido su dimisión en varias ocasiones, al igual que ANPE, que tuvo su reunión ayer mismo. También CC OO. Tanto UGT como CC OO y Suatea han planteado movilizar al profesorado, en protesta por lo que consideran una falta de planificación de este curso escolar y un recorte en las plantillas. En los encuentros con los sindicatos, en los que ha estado presente la nueva jefa de gabinete, Blanca Esther Aranda, se han tratado todos los temas laborales que reclaman las formaciones, desde el acuerdo de interinos hasta la petición de reducir la jornada para los mayores de 55 años.

Educación tiene otros frentes abiertos con la comunidad educativa: las aulas internivel (han generado mucho malestar en las familias), los desajustes horarios del transporte escolar y la semipresencialidad a partir de tercero de la ESO (hay una gran preocupación por lo que puede suponer para el fracaso escolar).

Y en este sentido, Educación anunció ayer que dotará de tecnología para impartir clases en 'streaming' un total de 108 centros que han tenido que aplicar el modelo semipresencial por falta de espacio y que «fomentará las competencias digitales y el aprendizaje en tiempo real o diferido». Los equipamientos llegarán a institutos, formación de adultos, escuelas de idiomas y centros integrados de FP, así como a la Escuela de Arte. El criterio que se ha tenido en cuenta es dotar de cámaras a todas las unidades que el curso pasado tuvieran más de dieciséis alumnos matriculados a partir de tercero de ESO. Cada centro recibirá material suficiente para dotar las aulas que cumplían este requisito.

Se ha iniciado la compra de mil cámaras web, 1.500 ordenadores con monitores táctiles y otros 500 monitores táctiles más para acoplar a dispositivos ya disponibles en los centros. Además, se están adquiriendo otros 1.500 portátiles con pantalla táctil para el profesorado y 1.200 equipos con conectividad para el alumnado en riesgo de brecha digital. El material llegará a los centros en el plazo de dos o tres semanas. El presupuesto para todo ello es de 3,2 millones y se está tramitando un convenio con la entidad pública Red.es, que supondrá 1,7 millones más.