El argayo de la ladera de Candanal continúa estable

La zona del valle de Peón y Candanal ha sido la más afectada por el temporal de las últimas semanas. El Ayuntamiento continúa pendiente del estado de la ladera que se vino abajo en el pueblo de Llaneces, obligando a desalojar una ganadería y dejando aislada una vivienda. Los equipos municipales están estudiando cómo abrir una pista alternativa para poder llegar a la casa, a la que si puede acceder con un tractor o andando. Los propietarios, un matrimonio mayor, han decidido permanecer dentro hasta que se abra un nuevo camino. El alcalde, Alejandro Vega, acudió ayer a hablar con ellos, para conocer cómo se encontraban y ver si necesitaban algo. Mientras, el deslizamiento que sorprendió a los vecinos el pasado 5 de enero parece mantenerse estable. La carretera continúa cerrada al tráfico hasta que no se pueda retirar toda la tierra.