La FSA: «Moriyón ha dejado claro que no hay 27 votos para poder aprobar la oficialidad»

El bloque de la izquierda -PSOE, Podemos e IU- han mantenido abiertas las opciones para llegar a un acuerdo sobre la reforma del Estatuto de Autonomía, prácticamente, siguiendo un símil deportivo, hasta que el árbitro ha pitado el fin del partido. Foro, que también se mostró favorable haciendo factible que se llegase a los 27 votos necesarios, lo condicionó a una negociación fiscal en paralelo. Las conversaciones, que han dado vueltas, aunque sin alejarse mucho de la casilla de salida, parece que ya se dan por concluidas. Sin éxito.

Esto ya se intuía el jueves, cuando el PSOE dijo que se desvinculaba de cualquier reforma fiscal. Respondía de esta forma tanto a Foro como a Podemos, que había presentado su propia propuesta unos días antes para avanzar en la negociación. IU hacía semanas que no se movía de su postura, inflexible, si lo que se pretendía era hablar de impuestos. ¿Y Foro? Se ha venido diciendo mucho, o distintos sectores internos han ido diciendo mucho, durante estas semanas. La postura final la marcó su presidenta, Carmen Moriyón el sábado en La Lupa de EL COMERCIO. «Nos desvinculamos», dijo culpando a Barbón de su inacción en este proceso, y de haber sido él quien primero dejó caer esta negociación.

Para quien aún viese la posibilidad de que esta respusta fuese ambigua, la interpretación del PSOE de las palabras de la presidenta de Foro zanjan cualquier debate. «Carmen Moriyón ha dejado claro que no hay 27 votos para poder aprobar una reforma del Estatuto que reconozca la oficialidad del asturiano y del eonaviego. Sus declaraciones han sido claras y rotundas», reconoce, con tristeza porque se rompa este proceso, la secretaria de Organización, Gimena Llamedo, a este diario. La dirigente socialista «lamenta» esta decisión de Foro, pero redobla su compromiso de registrar un proyecto de reforma en la Junta «si en el futuro alguna fuerza política cambiase de posición permitiendo que se alcance la mayoría cualificada de 27 votos».

En lo que toca ahora, la construcción del relato sobre qué ha fallado o por culpa de quién ha descarrillado, Gimena Llamedo recalca que «es evidente que si alguien ha trabajado para hacer posible una reforma estatutaria ha sido Adrián Barbón» y dice que los socialistas han actuado con «enorme prudencia, seriedad y generosidad en todo este proceso». A est este respecto, recuerda que ellos fueron «quienes pusimos en marcha la negociación e hicimos cesiones para propiciar avances». Sobre los puñales cruzados que ahora se lanzan entre fuerzas de izquierda, «es evidente que las críticas de algunos partidos son una cortina de humo que responde claramente a intereses electorales».