Una mujer que dio a luz en Cabueñes acusa al hospital de su contagio

Uno de los momentos más felices de la vida de una madre gijonesa se ha convertido en una «auténtica pesadilla». Fue a dar a luz a su segundo hijo y acabó contagiada por coronavirus, asegura la afectada. Ahora, estudia presentar acciones legales contra el centro hospitalario gijonés, entre otra cosas «por negligencia», pues ella y su marido acudieron al hospital con una PCR negativa y están convencidos de que el contagio se produjo tras compartir habitación con una embarazada que fue ingresada sin tener la PCR confirmada y que fue informada de que era positiva en la propia habitación», explica su abogada Paula Junquera Carruébano.

Según relata la afectada, todo comenzó el 16 de octubre cuando acudió al Hospital de Cabueñes para dar a luz. Relata cómo fue, tras dar a luz, cuando confirmaron el positivo de su compañera de habitación en la planta de obstetricia. «Se la llevaron en volandas, echaron a mi marido de la habitación y a mí me dejaron allí encerrada con el bebé». Fueron horas de angustia en las que «nadie me daba información», explica. La situación acabó con un alta adelantada. «El médico que me la dio no supo explicarme qué es lo que tenía que hacer, dada la situación, y me recomendó que llamase al teléfono covid para informarme. Así lo hice», señala.

Cuenta cómo, para su sorpresa, en el teléfono de información sobre la covid «me dijeron que no se me consideraba contacto estrecho ya que había permanecido en todo momento con mascarilla en la habitación y había cierta distancia entre las camas. Que me fuese a mi casa y permaneciese allí».

Decidió entonces seguir las indicaiones y se fue a su domicilio en compañía de su hijo mayor, la recién nacida y su marido para permanecer solo en aislamiento domiciliario, pero sin mantener ninguna otra medida de prevención con ellos, ya que no se consideró necesario. El 19 de octubre regresó al hospital de Cabueñes para hacerle la prueba del talón a la bebé.

Allí el pediatra, al conocer lo ocurrido, le informó de que «tenía que ponerse en aislamiento inmediatamente porque era contacto estrecho. Yo no lo podía creer», asegura. Desde entonces, permanece aislada en su domicilio con su bebé y su esposo y el otro niño en otro domicilio, también aislados. El 26 de octubre le confirman que su PCR ha dado positivo. Fue para ella todo un mazazo. «Acababa de dar a luz, con la niña recién nacida, aislada y sola en un momento tan delicado», lamenta.

Pero la confusión con las indicaciones y los protocolos a seguir continuaron a pesar de la confirmación del contagio. Cuenta cómo al hablar con su médico de cabecera este le indicó que «si no presentaba síntomas a los diez días de cuarentena podía salir sin repetir la PCR». Algo que según la abogada Paula Junquera hasta el momento se desconocía y deben estudiar.