El dron socorrista llega a Santa Marina

El equipo de salvamento de la riosellana playa de Santa Marina cuenta desde ayer con un nuevo ayudante, un dron socorrista que, una vez instalado, completó con éxito los primeros vuelos de prueba. Tal y como publicó EL COMERCIO el pasado mes de junio, el nuevo equipo servirá para ayudar a los vigilantes de la playa en su trabajo diario y para reducir al máximo el tiempo de respuesta ante cualquier eventualidad en el agua. La nave estará teledirigida por un piloto-socorrista que, una vez localice el punto exacto de la incidencia, soltará los dos flotadores-salvavidas de los que va provista la aeronave. La de Santa Marina es una de las cinco playas españolas que contará con este novedoso servicio a lo largo del verano, una experiencia que permitirá incorporar el uso de las nuevas tecnologías al servicio de la seguridad ciudadana.

Según avanzó en junio Pablo García, concejal de Seguridad y Protección Civil de Ribadesella, el dron «también podría dar servicio a la playa de La Atalaya en condiciones climatológicas adecuadas». Algo en lo que influirán notablemente las corrientes de aire y otros elementos atmosféricos. La nave teledirigida esta dotada con una cámara térmica con la que su conductor localiza el punto exacto de la incidencia. A su vez, porta un floppy, el tradicional salvavidas utilizado por los socorristas, que suelta cuando se encuentra a la altura del bañista en situación de peligro. «De esta forma se llegará a cualquier punto de la playa en décimas se segundo, garantizando la tranquilidad del usuario antes de la llegada de los socorristas», apuntó en junio el concejal Pablo García.

La experiencia de los drones socorristas ya se ha extendido por las playas de Australia y Chile. Este verano llega a España con la única intención de reforzar los servicios de salvamento ya existentes haciendo uso de las nuevas tecnologías.