Preocupación entre los sanitarios ante el aumento de fallecidos a 16 en un día

Dicen los expertos que la sexta ola de covid-19 ha entrado en «una meseta» epidemiológica, lo que significa que los contagios y hospitalizaciones se van estabilizando. No así el número de fallecidos, un dato que, desde hace varios días, causa grandes sobresalteo a los responsables de la sanidad asturiana. Ayer, se tocó techo. La Consejería de Salud notificaba 16 muertes por coronavirus , la cifra más elevada de esta onda epidémica.

El viernes de la semana pasada ya saltaban las alarmas: 10 fallecimientos en un solo día. El dato que ayer ofreció la Consejería, correspondiente al martes, eleva a 116 las muertes de coronavirus registradas en lo que va del mes de enero. Hay que remontarse a febrero y marzo de 2021 para encontrar una tasa de mortalidad semejante. Los médicos admiten «estar preocupados». Aun así, consideran que esta situación «entra dentro de lo esperado».

Y se explican: «Las hospitalizaciones vienen entre 7 y 12 días después del pico infeccioso; lo mismo ocurre con la UCI o el fallecimiento, que ocurre entre 7 y 12 días después de la entrada en planta». Eso conlleva que «la mayor tasa de mortalidad se produzca no al principio de una onda epidémica, sino al final, cuando empieza a bajar la curva de contagios».

Dicho esto, el director del área de Medicina Interna del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), Álvaro González Franco, diferencia entre «morir por covid y morir con covid» antes de dar su diagnóstico sobre la situación actual. «La mayoría de los pacientes que fallecen son personas de edad avanzada, con comorbilidades importantes», señala. Y, en estos casos, la covid «descompensa esas patologías previas» o las complica, pero no sería la causa principal de la muerte.

«Luego hay un segundo grupo, de personas más jóvenes, también vacunadas», prosigue Álvaro González Franco, «que se encuentran en una situación de inmunosupresión y, por tanto, la covid les afecta más que a una persona sana». Y, por último, «habría un tercer grupo, también más joven, pero no vacunado, que presenta infecciones graves de covid, como en las primeras olas», apostilla el director de Medicina Interna del HUCA, cuartel general de la sanidad pública asturiana y uno de los centros que soporta mayor presión asistencial debido a la covid.

En definitiva, «no todas las personas que fallecen con covid desarrollan una neumonía bilateral», como ocurría en las primeras etapas de la pandemia, cuando la población aún no estaba vacunada frente al coronavirus. De ahí que incluso los epidemiólogos del comité de expertos del Principado hayan trasladado a las autoridades sanitarias la conveniencia de analizar la mortalidad más allá del número de fallecidos y su edad», para determinar precisamente «cuántas personas mueren por covid cuántas mueren con covid».

Pero, ¿por qué se producen tantas muertes pese a que la mayoría de la población está vacunada? Sencillamente, «porque la tasa de infección está a años luz de las anteriores», apunta el doctor González Franco. O lo que es lo mismo: por una cuestión de probabilidad. A más contagios, hay mayores posibilidades de que la población enferme y fallezca. «Hasta esta sexta ola, nunca hemos tenido niveles de infección de más de 3.000 contagios diarios. Si no fuera por la vacuna, esto sería una catástrofe», sentencia.

Y aporta el dato de que, en anteriores ondas epidémicas, con una tasa de contagios «infinitamente menor», solo en el HUCA llegaron a estar ingresadas por covid 350 personas. En esta sexta ola, «el techo fue de 140 hospitalizados» y, apostilla González Franco, «eso es gracias a la vacuna». Como el hecho de que «veamos menos neumonías bilaterales y menos infecciones graves» por coronavirus,

Actualmente, en los hospitales asturianos están siendo atendidos 440 pacientes con sospecha o confirmación de covid. De ellos, 45 se encuentran en estado crítico. La presión asistencial «se reduce ligeramente en Atención Hospitalaria, aunque no en Atención Primaria», aseguran fuentes médicas consultadas por este periódico. La Consejería de Salud notificaba ayer 2.230 nuevos contagios, 118 menos que el día anterior, pero cuyo seguimiento recae, en la mayoría de los casos, en los profesionales sanitarios de los centros de salud.

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