El Principado cuida de un lobezno herido y los ecologistas urgen su regreso al monte
La osezna 'Cova', rescatada en abril, comparte recinto leonés con otro esbardu para analizar su liberación «las próximas semanas»
Desde el 24 de septiembre un lobezno se encuentra bajo control del Principado. Según la Consejería de Medio Rural, el animal fue rescatado en ... Mieres y trasladado al Centro de Recuperación de la Faúna Silvestre (Sobrescobio). «En el momento del ingreso se encontraba deshidratado, en pésima condición corporal y presentaba miasis masiva», esto es, una infección parasitaria. «En la exploración se pudo comprobar inflamación del tarso derecho, un corte de unos cuatro centímetros de longitud en la cara anterior de antebrazo izquierdo y atrofia en la musculatura lumbar. Presentaba dificultad para mantenerse sobre las extremidades y una debilidad muy acusada, además de una evidente cojera por aparente dolor en extremidad posterior derecha».
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El lobezno pesaba 8,93 kilos y no se le localizó fractura ósea. Los técnicos acordaron un tratamiento «de fluidoterapia, antibioterapia y se administró un antiparasitario y un anti inflamatorio». «Cuando esté plenamente recuperado se tomará una decisión, en base a los informes técnicos pertinentes», señala la consejería. Se trata del cuarto lobo que el Principado atiende; los tres anteriores acabaron en la Casa del Lobo de Belmonte, falleciendo en dicho complejo uno de ellos.
Fue la Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo (Ascel) quien desveló la existencia del lobezno. Tras saber de su captura remitió un escrito solicitando se le aclare por qué se capturó, los motivos por los que no ha sido liberado, y los posibles destinos que se barajan tras el tratamiento. «Si se trata de un cachorro o juvenil de lobo, éste debe ser devuelto y reintegrado en la naturaleza, siempre que sea posible», defiende la asociación.
«La posible existencia de ciertos intereses para que éstos animales formen parte de centros de exhibición no debería ni ser contemplada por gestores de la naturaleza», justifica el colectivo. Ascel recuerda que «en países de nuestro entorno, como Portugal e Italia, existen experiencias de liberación y adaptación con éxito de ejemplares de lobos previamente retirados de la naturaleza y recuperados incluso con extremidades amputadas».
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Por otra parte, la Junta de Castilla y León actualizó la información sobre 'Cova', la osezna rescatada en abril en Yernes y Tameza, con menos de dos kilos de peso. Se había caído de su osera a una zona de difícil acceso. Para su recuperación se la remitió al Centro de Recuperación de Faúna Silvestre de Villaescusa (Cantabria); tras ganar peso, a primeros de agosto pasó al recinto de aclimatación o presuelta de osos de Valsemana (León). Ahora le hace compañía otro esbardo «para mejorar su socialización y desarrollo. Su interacción permitirá valorar su liberación conjunta en próximas semanas».
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