Las reservas de sangre de Asturias se encuentran en situación «crítica» y dejan en el aire operaciones quirúrgicas

«Asturias necesita sangre urgentemente. Nuestra situación es crítica». El mensaje aparece, en rojo y letras mayúsculas, en la portada de la página web del Centro Comunitario de Sangre y Tejidos de Asturias. Se puede decir más alto, pero no más claro. Y es que la necesidad de donaciones llega a tal extremo que la semana pasada el Principado incluso tuvo que solicitar sangre a centros de transfusión de otras comunidades autónomas.

Se trata de una medida excepcional a la que ya hubo que recurrir en el mes de abril. De ahí que hayan saltado todas las alarmas en el Centro Comunitario asturiano, que venía siendo autosuficiente «desde hace varios años» y, según cuenta su directora técnica, Ana María Ojeda, «no tuvo que pedir sangre en ningún momento de la pandemia, hasta ahora». Eso da una idea de la urgencia del llamamiento lanzado estos días.

«Pero no solo necesitamos que se responda a este llamamiento», precisa la doctora Ojeda, «sino que debemos mantener un ritmo de donaciones continuo». Para que no merme el stock de sangre y poder así atender la demanda de los hospitales asturianos, es preciso recolectar entre 180 y 200 bolsas al día de componentes sanguíneos. Lo que no ha sido nada fácil durante los últimos meses, debido fundamentalmente a la alta incidencia del coronavirus, que enfermó a muchas personas en disposición de donar.

Para que la situación sea óptima, el Centro Comunitario de Sangre y Tejidos de Asturias debería contar con unas reservas de 800 bolsas de todos los grupos sanguíneos. Estos días, hay unas 400, es decir, la mitad. Cualquier urgencia, más allá de la actividad ordinaria, puede dejar al límite los depósitos necesarios para que el sistema sanitario funcione. «Esto es como un semáforo: con 800 bolsas estaríamos en verd y ahora estamos en rojo», explica Ana María Ojeda.

El repunte del coronavirus parece estar remitiendo, pero hay muchas personas contagiadas que todavía no pueden donar sangre. Eso coincide con el plan de choque emprendido por la Consejería de Salud para contener las listas de espera una vez superada la fase aguda de la pandemia. Un plan de choque que supone intensificar la actividad quirúrgica y las consultas externas, con cirugías y atención especializada en horario de tarde.

Si no hay suficiente sangre, dado que las urgencias -como accidentes o trasplantes- son prioritarias, el Servicio de Salud podría verse obligado a posponer algunas de las operaciones programadas dentro de su plan de choque. «De seguir así, no es descartable que haya que suspender intervenciones», advierten desde el Centro Comunitario de Sangre y Tejidos de Asturias.

La institución, sin ánimo de lucro, se creó hace 35 años con el objetivo de promocionar la donación de sangre, organizar colectas para su extracción y acometer el procesamiento de los diferentes componentes: hematíes, plaquetas y plasma. En Asturias, donan sangre cada año más de 22.000 personas, siendo la tercera comunidad de España con una mayor tasa por 1.000 habitantes. «Aquí somos muy solidarios», destaca Ana María Ojeda, al tiempo que pide un nuevo esfuerzo de la ciudadanía para que la región pueda recuperar sus reservas de sangre e insta «a la población joven a que se anime a donar».

Cualquier persona sana mayor de 18 años y menor de 65, que pese más de 50 kilos y no presente anemia ni problemas de tensión, puede ser donante de sangre. Actualmente, hay escasez de todos los grupos sanguíneos, especialmente A- y 0-. Hoy, una de las unidades móviles del Centro Comunitario extraerá sangre en Corvera-Las Vegas (calle La Estebanina) de 16 a 21 horas.

Temas

• Principado de Asturias
• Asturias