Sabores de Plaza en Plaza se traslada este año a los barrios de Avilés
El certamen se celebrará de 31 de julio al 3 de agosto con animación musical en puntos específicos en la periferia
El verano volverá a tener este año también su cita gastronómica en las plazas de Avilés, pero en lugar de repetir la fórmula de Sabores de Plaza en Plaza, que abría casetas en los principales rincones de la ciudad donde los hosteleros servían tapas y pinchos además de bebidas, este año el formato se trasladará a los barrios.
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Se trata así de dar ambiente a zonas menos concurridas de la ciudad, con una fórmula que puede resultar atractiva como para que clientes de otras zonas quieran desplazarse hasta los barrios, además de satisfacer a los vecinos y promocionar a los hosteleros que trabajan fuera del centro, que normalmente gozan de menos visibilidad y participan menos en este tipo de certámenes. Se logra así diversificar la actividad lúdica y de ocio y desaturar el casco histórico y el centro que cuentan con reclamos a lo largo de todo el verano.
El certamen, que contará con animación musical como una parte importante de su atractivo, se celebrará desde el jueves 31 de julio al domingo 3 de agosto. Durante cuatro días los hosteleros del entorno de barrios como La Luz o Villalegre ofrecerán sus diferentes propuestas gastronómicas en pequeño formato, acompañadas de bebida tanto en horario de comidas como de cenas.
El cambio busca trasladar la actividad a zonas más alejadas del centro para promocionar la hostelería de la periferia
La que será la novena edición de esta cita cambia así de rumbo. La iniciativa, que surgió de la colaboración entre el Ayuntamiento de Avilés y la Ucayc, trataba de trasladar algo que se estaba llevando a cabo con éxito en otros lugares de la geografía nacional.
En los últimos años la fórmula dio algunos problemas, por la dificultad de los hosteleros participantes en encontrar personal que pudiera atender al público en las casetas, ya que durante los días del certamen se duplicaba el servicio, por una parte el habitual en el establecimiento y, por otra, en las casetas. La respuesta del público, sin embargo, siempre fue buena, lo que se espera que ocurra también en las nuevas ubicaciones.
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Ahora, después de haber llevado los 'sabores' por las plazas más emblemáticas del casco histórico de Avilés, serán los barrios los que puedan sacar a relucir algunos rincones en los que ya existe actividad hostelera y que ahora se verán además enriquecidos por los conciertos como un aliciente más para tomar algo en ellos.
Los barrios se llevarán así el protagonismo en un fin de semana de transición entre el Intercéltico y el Festival de la Cerveza y en el que el centro de la ciudad acogerá el festival de música negra La Grapa.
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