Borrar
El Santo Entierro pudo salir en la tarde del Viernes Santo. PABLO NOSTI
Semana Santa de Avilés, con la mirada fija en el Interés Turístico Nacional

Semana Santa de Avilés, con la mirada fija en el Interés Turístico Nacional

El mal tiempo impidió el Viernes Santo la procesión de la Soledad después de unas celebraciones con una multitudinaria asistencia de público

Domingo, 20 de abril 2025, 02:00

El Domingo de Pascua marcará el final de las celebraciones de la Semana Santa de Avilés, si bien aún queda pendiente la misa de acción de gracias que se celebrará la próxima semana en Santo Tomás de Cantorbery en el segundo domingo de Pascua, el próximo 27 de abril. La recapitulación de las celebraciones de año plantea dos grandes cuestiones.

Una limitada sólo a 2025 como fue el impacto del tiempo. La lluvia amagó con estropear la procesión del Lunes Santo y, posteriormente, su presencia irregular amargó la Semana Santa a más de uno. Las lágrimas de San Pedro dejaron a la hermandad de Rivero sin salir a la calle en Martes Santo y el Jueves Santo acortaron el recorrido de los 'sanjuaninos'. Estos, en la víspera, se encontraron a su regreso a la calle de La Cámara con el bolardo elevado, parando el paso unos minutos antes que se solucionó.

El Viernes Santo, la lluvia respetó la procesión del Santo Entierro y la siempre emotiva ceremonia del Desenclavo. Sin embargo, el intenso aguacero provocó que la Real Cofradía de la Soledad y la Santa Veracruz no procesionase en un recorrido que siempre es seguido por muchas personas. La intensidad de la lluvia motivó la decisión para desazón de los cofrades y las damas que siempre acompañan a la Virgen. En el momento de cerrar esta edición, aún no había comenzado la procesión de la Resurrección pero todo apuntaba a que era muy probable que no saliese.

La Cofradía la Soledad adquirió un especial protagonismo con la carpa instalada en la plaza de La Mercedes hasta la mañana del Sábado Santo. En los últimos años, la Cofradía utilizaba el patio interior de la Casa de Eladio Muñiz o Josefina Balsera como lugar donde se ubicaba a la Virgen de la Soledad. Sin embargo, la venta del inmueble por el Arzobispado les privó de tal posibilidad.

La solución fue la instalación de una carpa, lo que ha permitido una mayor visibilidad de la Virgen durante estos días. Durante los días en los que estuvo instalada los cofrades se turnaron para atender las consultas de las personas y también un pequeño puesto de venta de velas, bolígrafos, rosarios y objetos relacionados con la hermandad de Sabugo.

No salir fue duro para los cofrades de La Soledad. Pablo Nosti
Las mujeres no pudieron acompañar a la Soledad. Pablo Nosti
La Cofradía de la Soledad estrenó carpa al lado de Santo Tomás. Pablo Nosti

1 /

La segunda gran cuestión es la aspiración de las hermandades de alcanzar el reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Nacional.

Masiva asistencia

A su favor se encuentra que justo tras ellas, y vinculada a la Semana Santa, se encuentra la celebración de las fiestas de El Bollo, que sí es reconocida como Fiesta de Interés Turístico Nacional.

Pero no menos importante es la multitudinaria asistencia de personas a las celebraciones penitenciales a la largo de estos días. Algunos momentos, como los 'bailes' de San Juan Evangelista en Miércoles Santo y en Viernes Santo por la Cofradía de San Juan Evangelista despiertan la curiosidad de muchas personas, pero lo cierto es que, desde La Borriquilla, todas las salidas han contado con una masiva asistencia de personas.

La asistencia a todas las procesiones fue masiva. Pablo Nosti

La multitudinaria participación popular se repitió el Viernes Santo, tanto por la mañana, cuando la plaza de España acogió la tamborada que recuerda el momento de la muerte de Cristo y el momento en que, según recogen las escrituras, se rasga el templo.

La emotiva ceremonia del Desenclavo del Cristo crucificado en la campa de San Nicolás también congregó a numerosos fieles.

La lluvia respetó a la Procesión del Santo Entierro, si bien las hermandades hicieron un gran esfuerzo por la situación del piso después de una mañana de tormentas y frío.

Las diferentes cofradías intentan enriquecer cada año las celebraciones dentro de los límites que implica la naturaleza de estos días. Así, el pasado Viernes Santo, al terminar la procesión del Santo Entierro, el tenor Emilio Menéndez cantó en la campa de San Nicolás 'La muerte no es el final', en una interpretación que emocionó a más de uno de los presentes.

La imagen de Cristo no pudo salir de San Antonio el sábado. Pablo Nosti

Las actividades culturales no se limitaron al centro de Avilés. En Santo Domingo de Miranda, el Viernes Santo se presentaron nuevos cuadros de Samuel Armas inspirados en poemas cuaresmales de José Manuel Feito, cuya memoria sigue vive en la parroquia a la que estuvo vinculada durante tantos años. En el mismo acto se interpretó la versión musical del primer poema de 'Silencio íntimo', un libro donde Feito recogió parte de su poesía religiosa.

En el momento de cerrar esta edición aún no había comenzado la procesión de la Resurrección, si bien había muchas posibilidades de que no llegase a comenzar. En ella participan la Real Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, que parte de Santo Tomás de Cantorbery, la Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Esperanza, que sale de la Iglesia de San Antonio de Padua, y la Cofradía de San Pedro de Rivero, que sale de San Nicolás. Si el tiempo lo permite, las tres coinciden en la plaza de La Merced antes de regresar a su lugar de origen.

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio Semana Santa de Avilés, con la mirada fija en el Interés Turístico Nacional