La gran corrida de la Feria Taurina de Begoña, en Gijón: dos orejas para Ortega

Ovación para Roca Rey con el sexto sin opciones

En labor de nulas opciones, el peruano dejó la estocada de la tarde.

El sexto fue el peor. Muy parado y agarrado al piso, no quiso embestir a pesar del empeño de Roca Rey, que lo intentó con dedicación a sabiendas que allí el éxito no era posible.

Ovación para Ortega en el quinto después de una gran faena que no remató con la espada

Dos pinchazos antes de la estocada se llevaron las dos orejas pero la ovación en los medios, por sentida y cálida, no es de las que se recogen todos los días.

Deslizando el trapo con mimo, casi sin tocar. Ni un desarme inoportuno rompió el ritmo de una faena inmensa.

Comenzó a sonar “Caridad de Guadalquivir”, y bajo sus acordes el sevillano paró de nuevo el tiempo en cada embroque.

Con el castaño quinto volvíó Ortega a bordarlo. Ya el inicio, por alto, rodilla en tierra, al hilo de las tablas, con el toro repitiendo, fueron palabras mayores.

Oreja para Fortes, cogido sin consecuencias en el cuarto

Volvió a la cara del toro, y su obra, igual de recia, igual de apretada, igual de reunida, tuvo entonces más eco. Como además lo tiró sin puntilla acero en mano recogió una oreja en recompensa

Volvió a la cara del toro, y su obra, igual de recia, igual de apretada, igual de reunida, tuvo entonces más eco. Como además lo tiró sin puntilla acero en mano recogió una oreja en recompensa

Tuvo buen dibujo la faena de Fortes, pero faltaba intensidad, y el público no termina de meterse en la obra hasta que casi en las postrimerías, el toro le tiró un derrote cuando el torero cambiaba el por delante el pitón y el viaje del animal, y del acosón le sacó el corbatín.

Más basto el sardo cuarto, que tuvo buena condición aunque a veces le faltara terminar de rebosarse.

Silencio tras aviso para Roca Rey en el tercero

El descabello, después de una buena faena, le impidió pasear trofeos

Tan a gusto estuvo el torero que sonó un aviso cuando estaba metido entre los pitones. Después de una estocada que no tuvo el efecto deseado, el descabello acabó por disipar el premio.

Se fue a buscarlo el peruano, lo cambió de terreno, y dejándole la muleta en la cara lo sujetó mientras el animal perseguía el trapo con ahínco en otras dos series también con la diestra, que por su intensidad y emoción levantaron al público de sus asientos.

Bajo el segundo, recortado, de excelentes hechuras, tuvo calidad pero después de un potente inicio de Roca Rey, con dos series muy rotundas sobre la mano derecha, decidió irse a chiqueros.

Dos orejas para una gran faena de Ortega al segundo

Lo tiró de una estocada sin puntilla y paseó las dos orejas

Suavidad y caricia también en los remates y en la única serie con la zurda, pues por ahí el toro pareció desplazarse menos.

Tuvo calidad el de Cuvillo, duró lo justo, pero lo administró a la perfección el torero, en una faena descrita al ralentí, reduciendo a embestida del animal hasta casi detenerla de lo despacio que movió la tela.

Pelín más alto el segundo, tocadito arriba de pitones, con cuello. Ortega ya se sintió en el saludo y le bordó un quite por gaoneras de los antiguos, echándose el capote a la espalda con medio farol y trayéndose el toro toreado en lugar de esconder el trapo en el último momento a modo de recorte.

Ovación tras petición para Fortes en el primero

Pinchó en una ocasión antes de agarrar una buena estocada, y por esta razón, seguramente, faltaron pañuelos en la petición.

Todo descrito con parsimonia, incluso la parte final, por circulares invertidos, ya muy metido en los terrenos del toro.

Buen toro el primero de Cuvillo, de hechuras y comportamiento. Fortes, que ya se lució en un quite por tafalleras, llevando muy toreado al animal, le dispuso luego una faena serena, de muletazos lánguidos, muy vertical la figura.

Fortes viste de gris perla y azabache, Juan Ortega de tirita y oro y Roca Rey de purisima y oro

Entradón en El Bibio para el cuarto festejo de abono. Ambiente propio de los grandes acontecimientos

Espectacular ambiente en El Bibio

Varios de los toros de Núñez del Cuvillo, en los corrales de El Bibio.

Se enfrentarán, como decíamos, a seis toros, seis, de Núñez del Cuvillo. Seguramente sea la ganadería con más caché de los últimos veinte años. Todas las figuras se han apuntado a ella en cuanto han tenido ocasión. Ponce, El Juli, Perera, Talavante, Roca Rey… y por encima de todos, José Tomás. A Gijón viene un encierro muy entipado y variado de pelajes. Un espectáculo para los sentidos. Si por hechuras existiera el toro prototipo de Gijón, no hay duda, sería este.

Juan Ortega

Sevillano (1990), tomó la alternativa en Pozoblanco en 2014 y la confirmó en Las Ventas en 2016. Será su tercera tarde en Gijón. Cortó una oreja en 2019 y otra el curso pasado.

Picadores: Óscar Bernal y José Palomares.

Banderilleros: Jorge Fuentes, Miguel Ángel Sánchez y J. Ángel Muñoz 'Perico'.

Andrés Roca Rey

Peruano de nacimiento (Lima, 1996), recibió la alternativa en 2015 en Nîmes y la ratificó en Madrid en 2016. Es la máxima figura del toreo actual y en Gijón, donde se presentó hace siete años, ha actuado en cinco ocasiones. Salió en hombros en tres de ellas, la última en 2023.

Picadores: Sergio Molina y José Manuel Quinta.

Banderilleros: Antonio Chacón, Francisco Durán ‘Viruta’ y Paquito Algaba.

Fortes

Nacido en Málaga en 1990, tomó la alternativa en Bilbao en 2011 y la confirmó en Las Ventas en 2013. Siete años después vuelve a El Bibio, donde debutó en 2014 y salió en hombros en su último paseíllo, el 13 de agosto de 2018.

Picadores : Francisco de Borja y Antonio Muñoz.

Banderilleros : Raúl Ruiz, Víctor García ‘El Víctor’ y Javier Gómez Pascual.

Tras sufrir una cornada la semana pasada en Pontevedra, y a pesar de que se confiaba en que pudiese reaparecer en Gijón, finalmente se anunciaba ayer la baja de Morante , que será sustituido por Fortes.

Todo está preparado ya para el cuarto capítulo de festejos taurinos con motivo de la Feria de Begoña. El Bibio esperaba hoy con expectación el gran cartel de este año en Gijón, en el que habían de lidiar toros de Núñez del Cuvillo Morante de la Puebla, Roca Rey y Ortega.