El Arco plantea un ERTE de cuatro meses para la plantilla de sus tiendas en Asturias

Tras conocerse la noticia del cierre de la treintena de negocios de El Arco, Congelados Pingu y La Quintana, el grupo recibió «varias propuestas de distribuidores interesados en suministrarlas bajo el nuevo modelo, así como solicitudes de personas dispuestas a asumir su gestión como franquiciados». Por ello, decidió optar por un ERTE en lugar del ERE inicialmente previsto al haberse roto el acuerdo que tenía con el único proveedor de las tiendas, el Grupo Cuevas. Precisamente, esta firma gallega le compró hace un año 29 locales y dos plataformas logísticas. Los que ahora podrían convertirse en franquicias son los que quedaron en manos de El Arco.

Este cambio de modelo de gestión «se alinea con la estrategia que la empresa venía desarrollando a través de su marca ensupunto, basada en un sistema de franquicias que combina cercanía, calidad y productos de origen local», explicó el grupo la pasada semana, cuando anunció que el ajuste de empleo sería temporal.

Además, desde la dirección se comunicó a la plantilla que cualquier trabajador interesado en asumir la gestión de una tienda puede trasladar su interés a la compañía. Los establecimientos ya están cerrados y los trabajadores, que superan el centenar, disfrutan sus días libres y vacaciones pendientes. Mientras, el comité negocia con la dirección el ERTE, aunque lamenta que no tiene información sobre la identidad de las personas que, según El Arco, están dispuestas a asumir la gestión de las tiendas como franquicias.