Los alivios al Piles por la tormenta obligan a cerrar parte de la playa

Las fuertes lluvias registradas ayer -hasta 21 litros por metro cuadrado según la Agencia Estatal de Meteorología- motivaron por parte de la Concejalía de Medio Ambiente la activación desde por la mañana del Protocolo de Aguas de Baño ante la previsión de alivios desde la red de alcantarillado al cauce del Piles. Esta medida conllevó la prohibición del baño en la playa de San Lorenzo, desde la escalera 12 hasta la desembocadura del río, si bien la bandera roja llegó a lucir en todo el arenal «debido al mal estado de la mar».

Esta es la segunda prohibición temporal al baño que se adopta en menos de una semana por razones ambientales, después de que el jueves se hiciera lo propio entre las escaleras 0 y 9 tras la detección de una mancha de gasóleo supuestamente procedente de una embarcación de recreo en alta mar.

Gijón cuenta con una red de alcantarillado unitaria en la que las aguas negras coinciden con las pluviales y que cuando ve superada su capacidad por la acumulación de precipitaciones en un corto periodo de tiempo procede al desborde del agua sobrante, en el caso de la zona este hacia el cauce del Piles a través de aliviaderos. La finalidad del pozo de tormentas que se está construyendo en la zona del parque de los Hermanos Castro es precisamente evitar el alivio de aguas sin tratar, almacenando temporalmente en un depósito el exceso de caudal. Su entrada en servicio, no obstante, no está prevista hasta el último trimestre de 2021.