El Ayuntamiento quiere que el colegio sea más verde y sostenible tras su remodelación

La transformación sería total. Tanto por dentro como por fuera. En la fachada, el proyecto de rehabilitación propuesto por Pedro Quero Arquitectos plantea una actuación que mejora el aislamiento acústico y térmico del edificio. Con material cerámico en las fachadas ventiladas que dan a Constitución y Severo Ochoa y «un sistema modular de paneles composite» reciclables y prefabricados en los frentes que dan al patio principal.

En este espacio, «el pulmón del proyecto», se propone «una nueva topografía, eminentemente verde, que racionalice los diferentes cambios de nivel existentes en las áreas de juego. Además, será un gran espacio donde predomine el verde, con huertos urbanos y arbolado de hoja caduca que proteja en épocas de mayor radiación a los niños en el patio y al propio edificio en sus fachadas más expuestas». Se incorporarán sistemas de protección solar, se instalarán sistemas de reciclaje de aguas pluviales y se facilitará el acceso directo desde el patio a las aulas de Infantil, algo que ahora no es posible.

La cubierta plana del edificio se convertirá en determinadas áreas en una cubierta vegetal, en la que habrá incluso -en el ala noroeste, en la tercera planta- un laboratorio vegetal donde el alumnado «podrá disponer de estaciones meteorológicas y experimentar directamente en un entorno natural».

Los viejos sistemas de calefacción y generación de agua caliente se sustituirán por aerotermia; se aprovechará la energía fotovoltaica con la instalación de paneles solares sobre la pista deportiva y la iluminación se actualizará con un sistema de aparatos LED digitalizado con detectores de encendido y temporizadores.

En el interior también se plantea una reestructuración, aunque no de tanto calado. El centro, al que en su día llegaron a asistir a clase cerca de mil alumnos y hoy solo acoge una quinta parte, se adecuará a los nuevos modelos docentes con una distribución más flexible de los espacios. «La modulación del edificio favorece la disposición de paneles divisores móviles que, junto con mobiliario adecuado, permitirán una disposición de usos más eficaz. La sustitución de tabiquerías ciegas por mamparas o divisiones dejando partes acristaladas y practicables garantizará un ambiente interior mucho menos constreñido, más diáfano y favorable a ventilaciones naturales cruzadas», señala el proyecto.