Un mosaico de 'huesos' para honrar el pasado ballenero

Un mosaico de mármol negro y blanco honra en el pavimento del tránsito de las Ballenas el pasado ballenero de Cimavilla. Forma parte de las obras para transformar esta calle en una vía de plataforma única e imita la disposición que mantienen los huesos de un gran cetáceo descubiertos en ese mismo punto durante las excavaciones arqueológicas realizadas a finales de los años 80. Ante el riesgo de daños que suponía la exhumación de esos restos, se decidió dejarlos enterrados.