Los nuevos juegos del parque Isabel la Católica, «más que diez»

Su valentía ha hecho que pruebe todos los juegos del renovado parque infantil, especialmente, le ha gustado el elemento de tres metros de altura que hay para trepar. Aunque confiesa que se ha caído, no pasa nada. «Me levanto y vuelta a jugar», dice. Nadie mejor que ella para puntuar los juegos del 1 al 10 para EL COMERCIO. En su caso, los califica con «un mil, ¡porque son muy divertidos!».

En otra zona del parque un grupo de niñas se balancea en uno de los flamantes columpios. Las risas se oyen por doquier. Entre las pequeñas se encuentra Candela Castañón, de ocho años. Ella no pudo acudir el día que se abrió la zona de juegos porque «tenía clase de música». Pero ya ha venido «varias veces». Aunque antes había muchos juegos, «no eran como estos nuevos. He estado atenta, viendo cómo colocaban cada uno de los 'cachibaches'», confiesa.

Una de las novedades que más éxito está cosechando es el balancín colgante. Ahí, Noa Prado y Francesco Giménez disfrutan a tope. «Hubo que esperar porque habían muchos chicos haciendo cola para subir», señala la madre de Francesco, Pamela Colicigno, pero al final, lo han conseguido. Era la primera vez que su hijo venía desde que reabrió el nuevo parque infantil. «Llevamos un rato largo porque hay que probar todos los sectores. Es muy completo», celebra Colicigno.

Noa también está contenta. Tras unas cuantas vueltas, baja del caballito y asegura que «nunca había probado algo así». Aunque su favorito, como no, «es la tirolina». Antes había solo una, pero ahora los peques están de enhorabuena porque «tenemos dos», relata.

El tubo modular para trepar también ha recibido un aprobado alto. Adeliana García sube intrépidamente por esta especie de tubo en forma de 'U' invertida en la que se puede trepar hasta el punto más elevado. La agilidad con la que Adeliana, de tan solo seis años, sube y baja por él sorprende hasta a su padre, Adriano García, que no le quita la vista de encima, por si acaso.

Adeliana puntúa los nuevos juegos con un «un seis», pero rápidamente, al echar un vistazo a todas las instalaciones cambia de idea: «mejor, ¡un diez! No he tenido miedo en ningún momento», dice orgullosa. Mientras habla con EL COMERCIO, no pierde comba y corre hacia otro juego donde no para de dar vueltas. «No me mareo nada», anuncia, aunque no acaba de convencerle y vuelve a trepar por el tubo.

Adeliana es natural de Zamora y ha venido con su familia a Gijón a pasar las fiestas. Según cuenta su padre, «cada año se ve mejor este parque. Es estupendo que pueda tener un espacio así para jugar y con tanta variedad. El juego del agua es muy original». Adriano echa de menos «el tobogán dentro de un barco que había antes. Le gustaba mucho a la niña», pero cree que los nuevos juegos del parque Isabel la Católica «son buenísimos. En Zamora hay parques que no son de este estilo, con tantos columpios y toboganes».

El nuevo espacio lúdico de Isabel la Católica, en el que el Ayuntamiento ha invertido 153.000 euros, incluye, entre las novedades, una mesa accesible para jugar con la arena, balancines, juegos multigiro, circuitos de habilidad y estructuras modulares. Todo un reto y una aventura para los más pequeños de la casa.