En el año 2013, Jim Cramer, prestigioso analista financiero de la CNBC, acuñó el acrónimo FANG, compuesto por las iniciales de cuatro empresas del campo ... tecnológico que modificaron el estilo de vida que teníamos, como son Facebook, Amazon, Netflix y Google. Posteriormente, al poderoso grupo se le añadió Apple, dando lugar a las conocidas mundialmente como FAANG.
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Recientemente, el analista de Bank of America, Michael Hartnett, denominó como 'Las Siete Magníficas' a un grupo de empresas tecnológicas (algunas de ellas las que formaban parte del FAANG, pero con otro nombre), que se entiende que son las más representativas de la bolsa norteamericana, en especial del índice tecnológico Nasdaq100. Esos siete gigantes han sido seleccionados por varios motivos, como su altísima rentabilidad bursátil en los últimos años, su alta capitalización bursátil y por vender u ofrecer servicios que han cambiado nuestras vidas, para bien o para mal. Todo invento o aportación tecnológica nueva está a disposición del ser humano y es el servicio o uso que nosotros hacemos de las mismas lo que cambia nuestras vidas, para bien o para mal. La lista de 'Las Siete Magníficas', según Michael Hartnett, es la siguiente:
Apple. Creada por Steve Jobs y por Wozniak, y con sede en Cupertino, ciudad de California, es considerada como la empresa mayor del mundo en el campo de la tecnología de la información y de la comunicación. La manzana y el anillo redondo en el cual está su sede son símbolos conocidos mundialmente. Apple tuvo una revalorización bursátil en la última década de un 800%.
'Las Siete Magníficas' lideran el mundo y ninguna de esas empresas pertenece al campo de las petroleras, ni es un banco ni es una siderurgia ni una fábrica de coches tradicional ni es una compañía de seguros
Microsoft. Con sede en Redmon, la empresa nació en 1975 de la mano del ya legendario Bill Gates y de su socio Paul Allen. A ellos les debemos el lenguaje BASIC, el hoy ya ancestral sistema MSDOS, Windows, el Word, Excel, etc. El poder de Bill Gates llegó a ser tan grande que muchos ven su larga mano moviendo los hilos del mundo. Microsoft tuvo una revalorización bursátil en la última década del 900%. Recientemente, adquirió Linkedin.
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Alphabet. Con sede central en Mountain View, engloba a varias empresas destacando Google, cuyo buscador ha revolucionado la información y ha democratizado el conocimiento. La empresa fundada por Larry Page y Serguei Brin, también controla a Google Maps el cual es de enorme utilidad para cualquier persona. Alphabet acumula una revalorización bursátil en la última década de un 550%. Se puede afirmar que lo que no figura en el buscador Google no existe.
Amazon. Con sede en Seattle y fundada en 1994, es líder del comercio electrónico mundial, bajo el mando de Jeff Bezos, el cual cedió su puesto de CEO hace poco. Su famoso lema 'From A to Zeta' significa que no tiene fronteras en el mundo a la hora de llevar cualquier mercancía a cualquier punto del planeta. Bezos denominó a su empresa así en honor del Amazonas, río más caudaloso del planeta, como un aviso a navegantes de lo que pretendía que fuese su empresa y desde un primer momento dijo que su intención al crear Amazon era ser la mayor empresa del mundo de comercio electrónico. Amazon acumula un ganancia bursátil en la última década de un 1.300% y desde que inició su andadura de cotización en bolsa se revalorizó un increíble 246.000%. ¿Quién no ha comprado algo en Amazon?
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Nvidia. Fundada en 1993 por el genio ingeniero taiwanés Jensen Huang, Nvidia es líder en Inteligencia Artificial y Procesos Gráficos. La empresa inicialmente no tenía ni nombre y todos sus productos llevaban el distintivo «Nest Version» (NV) y para buscar una palabra que tuviese impacto en el mundo latino idearon el término Nvidia. La empresa acumula una subida bursátil en la última década del 17.900% y desde su salida a bolsa se ha revalorizado un 350.000%. Sus programas son capaces de generar una realidad virtual casi imposible de diferenciar de la real.
Meta. Con sede en la californiana ciudad de Menlo Park, Meta engloba a monstruos de la comunicación y de las redes sociales como Facebook, Instagram, Whatsapp, etc. Su máximo exponente es Mark Zuckerberg. Durante años parecía inexplicable que una empresa que no generaba beneficios pudiese tener un gran valor en bolsa, pero el poder inmenso que tiene por la información de la que dispone de sus usuarios, le ha permitido generar una revalorización bursátil de un 700% en la última década. Pero son inversiones no aptas para cardiacos ya que, por ejemplo Meta, llegó a perder entre otoño del 2021 e inicios del 2023 un 80% de su valor, aunque luego recuperó con creces.
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Tesla. Con sedes en Palo Alto y Austin, la empresa fundada en el año 2003 por el hoy todopoderoso e influyente Elon Musk, lidera la fabricación de coches eléctricos en el mundo occidental. Acumula una revalorización bursátil en la última década del 2400%, su gran salto se ha producido en los últimos cuatro años, aunque su cotización es como una montaña rusa.
'Las Siete Magníficas' lideran el mundo y ninguna de esas empresas pertenece al campo de las petroleras, ni es un banco ni es una siderurgia ni una fábrica de coches tradicional, ni es una compañía de seguros. Los tiempos han cambiado y ahora el poder lo tienen la tecnología y la información y han provocado cambios en nuestras conductas y hábitos de vida, inimaginables hace años.
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Si tuviera que hacer una lista de los temores que me infunda la tendencia actual para el ser humano destacaría tres. El primero que se pueda producir una especie de híbrido entre el ser humano y el robot. El segundo temor es que la inteligencia artificial y la tecnología de la imagen hagan imposible discernir si estamos ante un video real o un montaje, si una historia es real o un fake. El tercer temor es que con el auge de estas tecnologías y la desaparición del dinero físico la libertad del ser humano pueda quedar muy reducida al estar en manos de un poder omnímodo que controle nuestras vidas, lo que hacemos, lo que pensamos, lo que consumimos, nuestros movimientos, etc. Algo que podría ser aún peor que la actual dictadura burocrático-telemática que se disfraza bajo el cínico nombre de Estado del Bienestar, que exprime al ciudadano.
Pero ya dice un proverbio chino que «Si no puedes contra la corriente, únete a ella» y oponerse a la corriente tecnológica actual es como intentar parar un tsunami con los brazos abiertos. Este cambio nos hará más libres o muy esclavos de algún sátrapa…pero ya los hay ahora.
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