La Asociación de Vecinos de Trubia se disuelve y pone fin a trece años de lucha

'Hasta aquí hemos llegado', pareció decir ayer la asociación de vecinos de Trubia una vez expirado el plazo para que alguien se hiciese con las riendas de la misma. El pasado 3 de abril, la directiva de la asociación anunciaba su dimisión en junta ordinaria alegando «agotamiento» y pidiendo implicación vecinal para que alguien la relevase. El plazo límite para encontrar un sustituto era el 1 de septiembre, domingo, por lo que se acordó celebrar la asamblea extraordinaria el 29 de agosto. O sea, ayer.

Tras la lectura de las cuentas y de los activos de la asociación , se sometió a votación el acta de la mencionada asamblea ordinaria del 3 de abril y se preguntó por última vez si había alguna candidatura. Ante la falta de respuesta se dio por finalizada la andadura de la asociación de vecinos. Fran Grimaldos y Roberto Velasco, presidente y secretario de la misma, quisieron dedicar antes unas palabras de «agradecimiento» a los socios allí presentes, resaltando la labor que habían llevado a cabo estos años desde el colectivo por la localidad.

«Clara y llanamente: nos disolvemos. Solo quiero agradecer a todos los compañeros el trabajo que se ha hecho», mencionó Velasco antes de resaltar que la asociación de vecinos de Trubia «nunca cedió a la presión de ningún partido político ni ninguna empresa». El presidente, Fran Grimaldos lamentaba que «era el momento de buscar un relevo, pero no lo ha habido» y deseó «suerte» los que vengan detrás. Los socios allí presentes quisieron agradecer la labor de los miembros de la junta directiva brindándoles un emotivo aplauso a modo de reconocimiento.

Después de acordar la disolución de la asociación de vecinos trubieca, fue el turno de decidir qué fin se le daba al remanente del colectivo. Por votación, se aprobó su reparto entre las asociaciones que habían colaborado con la misma, entre las que se encuentran asociaciones de vecinos adyacentes como las de Perlín, Udrión o Las Cuestas; agrupaciones sociales como la Asociación de Amas de Casa de Trubia; o entidades deportivas como el Real Juvencia.

Pero ni en este gesto caritativo se apreciaba ayer consuelo en la planta alta del Casino de la localidad cañonera. Era una jornada triste, de echar la vista atrás y de recordar los 13 años de vida de los que había 'gozado' este colectivo de vecinos, que surgió a modo de protesta contra la medida de Gabino de Lorenzo de retirar los contenedores de la parroquia en el año 2006 y que se había mantenido hasta la actualidad.

La lucha de los vecinos de Trubia logró evitar la construcción de una central de ciclo combinado junto a Química de Nalón, la apertura de un centro de salud y la mejora de la carretera AS-313 o el cambio de ubicación de la estación de medición de calidad del aire para ponerlo junto a las empresas más contamiantes. Todo eso lo lograron. Les faltó lo más importante: encontrar relevo.