El Ejército retrasa las pruebas del Dragón por riesgo de incendios en el campo de tiro

El calor, por paradójico que resulte, ha enfriado los plazos. El Ejército de Tierra se ha visto obligado a cancelar las pruebas de los dos demostradores del VCR 8x8 Dragón en el Centro Nacional de Adiestramiento San Gregorio (Cenad) de Zaragoza debido a las altas temperaturas y el riesgo de incendio. El plan inicial de la Legión consistía en iniciar las pruebas de tiro con las torres de 30 milímetros y munición ABM armadas en los prototipos del blindado 'made in Trubia' D1 y D2 esta misma semana; sin embargo, las condiciones meteorológicas marcarán esta vez el calendario.

En este punto, el contrato de los demostradores avanza despacio. La UTE formada por Santa Bárbara Sistemas, Indra y Sapa deberán entregar las cinco unidades previstas en el contrato de desarrollos tecnológicos que sentará las bases del contrato para la fabricación total del 8x8 Dragón.

En ese sentido, y en paralelo, la fabricación de las primeras 348 unidades del novedoso blindado por 2.083 millones de euros, que conforma el eje fundamental de la modernización de las Fuerzas Armadas, ya está más cerca que nunca de ver la luz.

En agosto, si todo sale a pedir del departamento de Margarita Robles y de la Dirección General de Armamento y Material (DGAM), una sociedad anónima formada por Santa Bárbara Sistemas, Indra, Sapa y Escribano firmarán el contrato y comenzará la fase de acopio de suministros, que se alargará durante casi un año. Así, Defensa espera invertir este 2020 los primeros 30 millones de euros al programa, que sembrará el campo de un nuevo futuro industrial en Asturias en lo que al sector de la defensa se refiere.