Encuentran muerta a una anciana en Oviedo después de que su hija se precipitase a un patio

La Policía Nacional investiga un posible parricidio en Ciudad Naranco. Cerca de las cuatro de la tarde de ayer, la sala del 091 recibió el aviso de que una mujer, E. M. N. R., de 45 años, se había precipitado al patio interior del edificio número 30 de la calle Augusto Junquera. Mientras los sanitarios atendían a la herida, que sufrió a causa de la caída un grave politraumismo y se encuentra ingresada en el Hospital Universitario Central de Asturias, los agentes se dirigieron al piso donde residía, el 5 D de la escalera izquierda, en busca de un familiar. Como nadie les abría, reventaron la cerradura. En el interior hallaron el cuerpo de la madre, A. R., con signos de haber fallecido hace ya unos días.

De inmediato, según fuentes de la Jefatura Superior de Asturias, se activó un dispositivo especial. Se dio aviso a los miembros de la Policía Científica y Judicial, que empezaron a recoger pruebas en la vivienda. Pasadas las siete de la tarde se procedió a levantar el cadáver para su traslado al Instituto Anatómico Forense, donde se le practicará la correspondiente autopsia para determinar las causas del fallecimiento.

Los agentes recorrieron en busca de pistas toda la vivienda. Tras varias horas, sobre las nueve de la noche, sacaron una caja blanca con objetos y la trasladaron en un vehículo policial. La tarde fue un ir y venir. Minutos más tarde, los Bomberos, que ya habían estado en una primera intervención, regresaron al lugar de los hechos para poner un candado a la puerta de la vivienda y evitar así intrusiones que deshagan las pruebas que han recabado. Entrada la noche, un grupo de cuatro agentes abandonaron el edificio.

Los vecinos de la calle Augusto Junquera calificaron lo ocurrido como «una desgracia» y afirmaron que lo ocurrido «se veía venir». Esta no era la primera vez que la Policía acudía a la vivienda, siempre según su versión. La hija supuestamente padecía problemas mentales y las discusiones con la madre eran continuas: «También discutía mucho con su padre pero falleció hace un tiempo», indicaron las mismas fuentes. «Se oían mogollón de voces, pero en los últimos días no escuchamos nada. Pensábamos que estaban de viaje», relataron. En los últimos días tampoco las vieron por el barrio.

A las 16.15 horas de ayer oyeron un fuerte ruido. Era la Policía intentando entrar a la vivienda. Los agentes recabaron el testimonio de varios vecinos para incorporarlo a la investigación.

Temas

• Oviedo
• Sucesos en Asturias