Un Austin con casi cien años a empujones por la calle Uría y el estreno de la Policía a caballo

A pesar de lo multitudinario de la jornada de ayer, la septuagésima edición del desfile del Día de América en Asturia se saldó sin apenas incidentes. Quizá el capitulo más tenso de la tarde fue el fallo del motor de un antiguo coche Austin 10 de casi cien años, que lo dejó parado en mitad de la calle Uría mientras comandaba al Grupo de Indianos Ciudad de Oviedo. Los propios integrantes de la marcha terminaron empujando al peculiar 'haiga' con problemas mecánicos mientras los asistentes jaleaban la empresa. Afortunadamente para ellos, no era una de las unidades más pesadas del desfile.

Uno que se encargó de cerrar la unidad de agentes a caballo de la Policía Nacional, con cuatro majestuosos ejemplares que merecieron más de una ovación y que participaron por primera vez en la comitiva. Tranquilos, cerraban la retaguardia, solo seguidos, al final, por los vehículos del servicio de limpieza, que borraron en minutos todo rastro de la celebración.