Santa Bárbara reorganizará la fábrica de Trubia ante la nueva carga de trabajo

La decisión de General Dynamics European Land Systems de concentrar en la fábrica de armas de Trubia el ciclo integral de la fabricación de los blindados 8x8 ha sido motivo de celebración por parte de las autoridades asturianas por lo que supone para la industria regional. El futuro cercano en la factoría se prevé intenso, con hasta el doble de la carga de trabajo prevista, ahora que las instalaciones de Santa Bárbara Sistemas en Oviedo absorberán el apartado de integración de sistemas de los blindados -hasta la fecha, en Trubia solo se construían las barcazas-, que estaba centrado en la factoría de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla, donde, por el contrario, se ha despedido al 10% de la plantilla.

Para adaptarse a este nuevo esquema industrial, tal y como han advertido a EL COMERCIO fuentes conocedoras del proceso, la empresa «despejará» el taller de mecanizado, conocido como la nave del 'Dardo', y trasladará la moderna maquinaria a la nave donde se construía el blindado Leopardo. Así, la primera quedará libre para asumir la integración final de los sistemas de armas completos de los vehículos, entre ellos, el VCR 8x8 Dragón, ya en marcha, o los Ascod del contrato Filipino.

A pesar del aumento de horas de trabajo, la plantilla, en este momento, no tiene claro cómo encarar el tajo al no ser la integración de sistemas de armamento parte de su especialización. En un principio, Santa Bárbara proyectaba la creación de 300 nuevos empleos directos en la capital asturiana solo gracias al 8x8 (900 en toda España), adjudicado a Tess Defence por 2.100 millones de euros para la construcción de 348 unidades del vehículo; no obstante, ahora la carga de trabajo se multiplicará a favor de Trubia y resta por determinar el número de contrataciones que llevará aparejada la reestructuración.

En todo caso, la empresa ha defendido ante los trabajadores que la reconfiguración no afectará a los plazos de los programas en marcha para el Ejército de Tierra a ruedas y a cadenas, el Dragón y el Castor, respectivamente.

Todo, cuando la fábrica trubieca pasa a ser el principal centro especializado en desarrollo integral de blindados del país en el que opere la marca europea del gigante armamentístico estadounidense.

En Sevilla, los ánimos están caldeados. Ayer, los trabajadores de Alcalá de Guadaíra se concentraron desde las ocho de la mañana ante las puertas de la factoría. No fue el único movimiento. A las diez se convocó un pleno del comité intercentros de Santa Bárbara Sistemas y a la una de la tarde, lo mismo, pero esta vez con el comité de empresa de la fábrica de armas de Trubia. Las conclusiones: la plantilla de la villa cañonera ha convocado una jornada de paro total -de ocho horas- para el próximo día 11 y dos más que irán en consonancia con el calendario que decidan los sevillanos.

En palabras del presidente del comité, Pablo Coto, «la empresa nos ha estado engañando y ahora nuestro principal objetivo es lograr una solución para esas 24 familias (suman 21 despedidos en Sevilla y 3 en el centro de la compañía en Madrid)». Sienten dijo, «desconfianza» ante los planes futuros, ya que «las explicaciones que nos han dado nos parecen absurdas».

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