El Avilés hace cuentas en su examen final

El Real Avilés Industrial llega hoy domingo (12 horas, Suárez Puerta) a la última jornada de liga regular como si de un estudiante perezoso que lo ha dejado todo para el final se tratara. Empezó el curso bien, optimista y con la ilusión de repetir el sobresaliente del año anterior, pero el exceso de confianza y expectativas le han situado ante la cruda realidad de un examen final que puede acabar en suspenso y cuestionar su futuro. Por suerte tiene dos comodines para que la prueba no se le atragante en exceso. Le vale un suficiente raspado, un empate, y el examinador es un rival, el Ourense, que todavía no se ha quitado la resaca de encima de tanta celebración por el ascenso conseguido en la pasada jornada.

Manolo Sánchez Murias volvió a variar ayer la sede prevista para el último entrenamiento de la semana, al cambiar el Suárez Puerta por uno de los campos de La Toba. La intención de preservar el césped ante la lluvia evitó otra sesión a puerta cerrada, si bien tampoco parece que vaya a haber más cambios que los 'obligados'. Por ejemplo, con la entrada en la delantera de Claudio Medina tras su sanción, y la posible alineación de Zubiri en el centro de la defensa, aunque con dudas por su inactividad en las últimas jornadas. El técnico gijonés mantuvo el viernes la incógnita de la portería, donde Davo y Álvaro Fernández volverán a disputarse el puesto. La única baja será, por tanto, la del lesionado Raúl Rojas.

Si el Real Avilés (41 puntos) suma un punto y el Marino de Luanco (39) gana, jugaría la promoción la Gimnástica (40) si pierde o empata ante el Coruxo. En caso de una victoria del equipo cántabro, se produciría un triple empate a 42 puntos entre Real Avilés, Marino y Coruxo, y caerían a promoción los luanquinos al tener la peor puntuación de los partidos disputados entre ellos. Lo mismo sucedería si hay un cuádruple empate de esos tres equipos con el Fabril a 42 puntos. Jugaría la promoción el Marino.

En el caso de una derrota del Real Avilés ante el Ourense, se salva de la fase de permanencia si el Marino pierde o empata, o si la Gimnástica pierde.