Un equipo de Primera División se lanza a por el fichaje de Miguel Sierra para su filial

Que el Real Avilés había fichado en la pretemporada pasada a una joya en bruto estaba claro casi desde el primer día que Miguel Sierra debutó con la camiseta blanquiazul. El club lo sabía y ató por dos campañas al extremo granadino, que por entonces tenía 19 años, ante la posibilidad de que explotara la pasada temporada en Segunda RFEF.

La calidad de Sierra no tardó en emerger a pesar de la temporada irregular tanto del club como del jugador, que acabó completando 26 partidos, 14 como titular, con 1.357 minutos y un gol anotado. Sus destellos cada vez que tuvo la oportunidad tampoco pasaron desapercibidos para los ojeadores de clubes de superior categoría a la Segunda RFEF, y ya en el mercado de invierno surgieron los primeros movimientos para sondear su fichaje.

El Avilés ha recibido desde entonces varias ofertas para traspasar a Miguel Sierra, pero no fueron tenidas en consideración al estar muy alejadas de la valoración que el club tiene del granadino, que es uno de los componentes diferenciales en la plantilla que entrena Javier Rozada. Pero todo ha cambiado en los últimos días, ya que, según ha podido saber LA VOZ DE AVILÉS, un club de Primera División se ha lanzado en serio a por este fichaje.

La oferta económica que ha recibido el Avilés es muy importante y, aunque la negociación sigue abierta, hay muchas opciones de que Miguel Sierra abandone la disciplina blanquiazul en las próximas horas.

En caso de formalizarse el fichaje, el extremo se incorporaría a su nuevo club de Primera División para jugar la próxima temporada en el equipo filial.

Esta operación trastocaría los planes del Avilés desde el punto de vista deportivo, que pierde a un jugador ofensivo que había empezado a un buen nivel la pretemporada, pero le daría al club una inyección económica que ayudaría no sólo a buscarle un recambio a Sierra, sino a completar la plantilla en los puestos de ataque, que es el principal objetivo del director deportivo Miguel Linares en el corto plazo.

Hasta el momento, la idea antes del posible traspaso del extremo granadino pasaba por el fichaje de tres jugadores para jugar las bandas y en el centro del ataque, con la premisa de que dos ocupen licencia sub-23 y el tercero podría ser sénior.

Linares y su equipo esperan cerrar alguna de las operaciones abiertas para incorporar a jugadores que en algunos casos tienen un caché destacado en Primera RFEF. No obstante, el mercado de fichajes este verano va lento desde Primera División hacia abajo, tal y como suele suceder cuando hay competiciones como la Eurocopa, y alguno de esos fichajes podría demorarse.

Está casi descartado que alguna de las incorporaciones que faltan en el Avilés provenga de una cesión desde clubes próximos como el Sporting y el Oviedo. Además, en los próximos días se tomará una decisión sobre Diego Boza, que está a prueba con el equipo blanquiazul pero que todavía no ha tenido muchas oportunidades para mostrar su valía ante los ojos del técnico Javi Rozada.

Por otro lado, también se trabaja en el capítulo de bajas, aunque sin acuerdo aún para rescindir los contratos de Trabanco, Serrano y Mauro, que son los candidatos para liberar fichas sénior en la primera plantilla blanquiazul.