Las Palmas y Girona huyen de la relajación pese a la ventaja

En el caso del técnico del Girona fue el que más claramente expresó la importancia que le da al encuentro y lo calificó de «una final», incluso del «partido más importante de la temporada y nos hemos ganado el derecho a depender de nosotros». En ese sentido, el madrileño dijo que tiene claro que «si no vamos a ganar no conseguiremos puntuar».

Por su parte, García Pimienta, técnico de Las Palmas, se pronunció en una línea muy similar «el domingo no tenemos los deberes hechos, tenemos que ir a ganar». El entrenador amarillo descartó la posibilidad de realizar cambios en el equipo pensando en el 'play off' e insistió en que «el mensaje es claro, nos ha costado muchísimo trabajo llegar hasta aquí y no lo vamos a dejar escapar». «Todos sabemos que los deberes no están hechos y vamos a seguir con todos los medios para hacer un gran partido y ganarlo», apuntó.

Míchel Sánchez, por su parte, pide a los suyos un «último esfuerzo» ante el Burgos y afirmó que «si damos nuestra mejor versión tendremos muchas opciones de ganar el partido» y también que es el momento de que «cada futbolista saqué todo lo que tiene y ser un Girona reconocible y que de una alegría a su afición fuera de casa».

Además, receló del hecho de que el Burgos no se juege nada: «Son el equipo que menos goles ha recibido como local (12). Esto quiere decir que en su casa y con su gente son un equipo muy peligroso». Además, recordó que El Plantío tendrá un lleno histórico para despedir la temporada y sobre la posibilidad de primas a terceros, dijo que «creo en la profesionalidad, en el fútbol y en la deportividad. Esto es algo que a mi no me gusta y en los últimos años se ha mejorado en este aspecto. No he pensado ni un segundo en que el Burgos pueda tener un incentivo así para ganar».

Por su parte, García Pimienta sobre el rival que se encontrará mañana destacó que el entrenador del Sporting, Abelardo, «es muy profesional», algo que hizo extensivo a la plantilla rojiblanca: «Van a salir a ganar el partido, aunque no se jueguen nada». Para Las Palmas, el partido es «importantísimo» y el técnico espera que sobre el césped de El Molinón se note «esa gran diferencia».

La afición azul ha respondido a la llamada del equipo para el encuentro de mañana y el ritmo de venta de entradas en los últimos días ha sido muy alto, por lo que quedan menos de 2.000 entradas por vender. Se espera que entre hoy y mañana puedan despacharse localidades para que el estadio supere los 20.000 espectadores.

Los puntos de venta en las tiendas seguirán abiertos hoy y los aficionados podrán adquirir las entradas de acompañante, al precio de cinco euros, mañana en las taquillas del estadio desde las 19 horas.

Además, la Asociación de Peñas del Real Oviedo ha convocado un recibimiento al equipo en la rampa de acceso al estadio Carlos Tartiere. La cita será a las seis de la tarde, para lo que el equipo adelantará unos minutos su salida hacia el estadio.

Los mensajes de apoyo de los aficionados se suceden en los últimos días y ayer fue el grupo Symmachiarii el que en sus redes oficiales lanzaba el mensaje «Por muy complicada o dura que fuese la situación está afición nunca abandonó. Nos sobran los motivos para ir este domingo al estadio #TodosAlTartiere».