Naufragio azul en la isla

El Real Oviedo ofreció su peor imagen ante Las Palmas y acabó goleado, 3-1, en un encuentro en el que no se salva nada del conjunto azul, frágil en defensa, negado en la creación y romo en ataque. La derrota agudiza la crisis de los azules que son penúltimos y no dan síntomas de mejora.

El once azul presentó tres novedades con relación al partido ante el Sporting, con la entrada de Javi Fernández, Omar Ramos y Bárcenas, en sustitución de Carlos Hernández, Nieto y Riki. Omar Ramos ocupó el costado derecho, Bárcena el izquierdo y Borja Sánchez la mediapunta.

Las cosas no pudieron empezar peor para los azules que a los tres minutos ya perdían. Una pérdida de balón de Lolo fue suficiente para que el balón le llegara a Narváez que con un disparo cruzado batió a Champagne. Los azules volvían a complicarse la vida por falta de contundencia defensiva, al no ser capaces de despejar un balón que no tenía demasiado peligro.

Los canarios no necesitaron hacer un juego brillante para tener el partido controlado, ante un Oviedo, que tenía bastante con defenderse y apenas era capaz de tener el balón. El equipo volvía a estar muy largo y eso le hacía sufrir sin balón y no encontrar apoyos para salir con él hacia la portería visitante.

Los azules empezaron a despertar con el paso de los minutos y aprovecharon que Las Palmas le dejaba terreno para asomarse, aunque tímidamente, a la portería local. Un remate de Ortuño alto fue el primer aviso. El equipo sacó varios centros al área, pero no acababa de encontrar rematador.

El equipo de Rozada pasó a dominar el partido unos minutos. Bárcenas entraba bien por la izquierda, pero seguía sin encontrar a Ortuño con sus centros. Por la derecha la banda quesaba para Sangalli, ya que Omar Ramos tenía tendencia a meterse hacia el centro. Bárcenas tuvo una buena falta en el vértice del área, pero lo envió a las manos de Vallés.

Los locales, con el marcador a favor seguían esperando para tratar de marcar a la contra. Algo que lograron a los 38 minutos cuando se encontraron los dos mejores jugadores locales. Pedri inició una contra y sirvió a Jonathan Viera para que batiera a Champagne cruzando el balón.

El conjunto carbayón era un equipo a la deriva, que hacía lo que le dejaba Las Palmas, hasta donde le dejaba y luego volvía a no ser capaz de frenar al rival en el centro del campo, donde los mediocentros eran superados una y otra vez por la calidad de los canarios.

La conclusión de la primera mitad fue la de un equipo sin alma, que jugaba sin confianza y que ante la calidad del rival no fue capaz de, al menos, juntarse para defender con cierto orden.

En el descanso Rozada dejó en el banquillo a Tejera y Omar Ramos, para dar entrada Jimmy y Mossa. El equipo pasó a jugar con tres centrales, Javi Fernández, Arribas y Christian, mientras que Sangalli y Mossa eran los carrileros. Jimmy y Lolo fueron los medios centros, mientras que Borja se mantuvo en la mediapunta y Bárcenas como segundo delantero.

El equipo reaccionó y dio un paso al frente, pero pudo aprovecharlo Las Palmas que tuvo dos claras oportunidades, ambas con Jonathan Viera como protagonista, ya que se quedó solo ante Champagne y en ambas el argentino acertó en el mano a mano.

La reación del incio de la segunda mitad duró poco y Las Palmas siempre estuvo más cerca de hacer el tercero, que de recortar distancias los azules. Viera fue el encargado de hacerlo en un lanzamiento de falta desde la frontal que colocó en la escuadra.

Bárcenas maquilló el resultado a cuatro minutos del final, tras aprovechar un buen centro de Sangalli.